Álex Balboa ha reconocido que «los tres días de desconexión han venido bien para el descanso de las piernas. Ahora estamos con ganas de competir y tenemos una oportunidad muy buena para enseñar al míster que estamos en condiciones de ayudar en la liga. Los jugadores de la cantera que ahora estamos con la primera plantilla seguimos esperando nuestras oportunidades como ya me pasó a mí, por ejemplo, contra Las Palmas», dijo.
El también jugador del Nzalang Nacional de Guinea Ecuatorial estaba hace un par de meses entre los dos equipos, el primero y el filial. «Yo el verano lo enfoqué para estar con el primer equipo y luego pasaron algunas cosas, pero el trabajo estaba ya hecho. La Copa es una competición muy bonita en la que el Alavés llegó a la final hace no mucho. Esperemos que este fin de semana podamos pasar a la siguiente ronda», añadió.
Todavía queda en la mente del equipo el triunfo liguero contra el Zaragoza jugando una hora con diez efectivos. «El trabajo de la gente que estaba en el campo, en la grada o en el banquillo fue muy bueno. Se demostró que estamos en el mismo barco y que vamos todos a una. Somos una piña. Cuando yo voy a Mendi aviso a mis amigos y a mi familia y luego, es como si estuviera en Ibaia. Pero es verdad que el estadio impone», señaló.
Incidiendo en el torneo del KO, Balboa siguió dando pistas. «La Copa da oportunidades a los equipos de inferior categoría porque es a un partido y en el estadio del equipo que está más abajo en la competición y eso hace que se motiven y que traten de dar la sorpresa. Iremos con ganas y pienso que lo vamos a sacar. Además, para ser de Segunda RFEF, el Lleida Esportiu tiene un buen campo», sentenció.