El delantero togolés ha anunciado que cuelga las botas y no seguirá dando pasos en su prolífica carrera, que le llevó durante 20 años a militar en varios de los más importantes conjuntos de Europa. Después de terminar su vinculación con el modesto Semassi de su país, no continuará en activo y pone así fin a una gran trayectoria goleadora como delantero.
Adebayor surgió del Metz, al que llegó de su país a principios de siglo. Pronto pasó a clubes importantes como el Mónaco y el Arsenal, con el que debutó en la Premier. Sus mejores pasos llegaron ahí, al igual que posteriormente en el Manchester City. La forma de jugar, su zancada prodigiosa y los goles que anotó le hicieron ser un futoblista muy querido.
Coincidieron sus mejores años con una álgida participación con la selección. Tocó la gloria disputando el Mundial de 2006 y también el infierno cuando un tiroteo al autocar de Togo les impidió jugar la Copa de África de 2010 en Angola. Poco después de aquello se fijó en él el Madrid, que lo adquirió como cedido en la segunda parte de la temporada 2010/2011.
Cesión en el Madrid
En el conjunto blanco disputó 14 partidos en Liga y anotó 5 goles. Además, logró el único título importante de su carrera, la Copa del Rey, en cuya final ante el Barcelona tuvo minutos entrando en la segunda mitad. Antes, en semifinales, había marcado uno de los goles al Sevilla. Su gran día como blanco fue el de sus despedida, cuando le marcó tres goles al Almería en un 8-1 en el Bernabeú.
Adebayor regresó a la Premier para jugar en el Tottenham y el Crystal Palace. Después empezó el declive jugando en ligas menores como la turca e incluso la paraguaya en las filas de Olimpia. El regreso a Togo fue el anticipo a un final que ahora se produce, el de la retirada de uno de los jugadores africanos con más carisma de todos los tiempos.