El presidente de la FEGUIFUT, Venancio Tomás Ndong Micha, se rinde y se ha declarado asfixiado por el tema de la deuda de la institución con los exseleccionadores, Becker y Pozanco, y ha comunicado a su junta y a la prensa que «si la FIFA decide echarnos de la Copa del Mundo, dimito como presidente». Eso podría pasar en 12 días ya que el sorteo está previsto para el 13 de julio 2023.
«Hemos heredado una deuda que no hemos generado; un problema que no está teniendo solución. Puede haber alguien que pueda llevar las riendas y hacerlo mejor. Cuando asumí la presidencia teníamos objetivos a trazar, y en dos años todos habéis visto de lo que somos capaces».
Los proyectos estrellas, según Ndong Micha, eran que el Nzalang se clasificase para la Copa de África y el segundo era conseguir que la selección nacional lo haga también para la Copa del Mundo. Sin embargo, cree que el intento se desvanece si no se paga a los exseleccionadores. Por lo tanto, «si nos expulsan del mundial, aquí se acaba el proyecto, porque habremos fracasado», asegura.
Lo cierto es que Guinea Ecuatorial aún tiene tiempo para zanjar el tema, al menos hasta el 12 de julio, antes de la ceremonia del sorteo previsto para el 13 de julio en Abijan para la zona África. Pese a que en Malabo se habla de una oferta inicial de 800.000 Euros para abrir las negociaciones, y las manifestaciones de la FEGUIFUT sobre que los exseleccionadores exigen elevar la cantidad a 1.400.000 Euros, Pozanco no dudó en responder a través de su cuenta de Twitter.
«No es verdad que la institución ha intentado negociar con los exseleccionadores, han sido los exseleccionadores los que han intentado en varias ocasiones sin recibir respuestas. NO es cierto que los exseleccionadores se separaron de la institución, fue el ministro de Juventud y Deportes (Cándido Nsue) con el respaldo de (Gustavo Ndong) quiénes cesaron unilateralmente a los exseleccionadores. Los exseleccionadores no exigen nada a la institución, sólo piden que se cumpla con las decisiones del TAS y de FIFA. NO es cierto que se ha ofrecido un monto (800.000€) a los exseleccionadores para negociar. NO es cierto que los exseleccionadores están presionando a la institución y tampoco al Gobierno, sólo quieren solucionar el problema para que NZALANG NACIONAL no pueda quedar fuera del Mundial 2026. Después de las gravísimas acusaciones realizadas desde el Gobierno diciendo que los exseleccionadores están robando y chantajeando al país, no se puede esperar que los exseleccionadores se sienten a negociar», respondió el 29 de junio.