La municipalidad de la zona de Ekuku prohibió a las vendedoras de pescado fresco exponer sus mercancías en las aceras porque el Gobierno a través del proyecto Paspa les habilitó puestos donde pueden ejercer con normalidad su actividad comercial. Pero el elevado coste de los puestos de alquiler, sigue siendo el mayor problema para las vendedoras de Ekuku.
Cada puesto cuesta 35.000 francos por un metro cuadrado, un precio que, según ellas, no cae a favor. Afirman que en varias ocasiones se registra poca venta, de ahí sus quejas. Una inquietud que ya presentaron a los responsables del Departamento de Pesca y hasta la fecha no han llegado a buen acuerdo por este precio.
Las comerciantes de este mercadillo se han unido como una sola persona solicitando al Gobierno del país, la mediación de esta gran preocupación ya que tienen familias y no disponen de grandes cuantías económicas para el alquiler de los puestos.
«Somos ecuatoguineanas, reclamamos nuestros derechos, tal y como las mujeres que venden en el mercado de KM 5 o de Bikuy, y sabemos cuánto se paga allí, por eso consideramos que nuestra tarifa es muy alta, solo buscamos el pan para nuestros hijos, por eso estamos quejando y pidiendo a Paspa y al ministerio tutor que nos reduzcan la tarifa por que no se puede», decían al unísono.
Las comerciantes no quieren salir de este mercado, de hecho piden una solución y que el precio del alquiler sea menos para que ellas puedan ser capaces de pagar el alquiler de sus puestos de venta.