Esa instalación tiene una capacidad de producir 220 millones de vacunas por año y las vende en Sudáfrica y otros países africanos.
Ramaphosa dijo que África ha asegurado 500 millones de dosis de vacunas COVID-19 a través del equipo de trabajo de adquisición de vacunas de la Unión Africana, pero cree que el continente necesita más.
“Estas dosis representan solo alrededor de la mitad de lo que el continente necesita para vacunar a 900 millones de personas a fin de alcanzar la meta del 70 % establecida por la Organización Mundial de la Salud”, dijo Ramaphosa.
Además de producir vacunas para el COVID-19, la nueva instalación se centrará en el desarrollo de productos para combatir el VIH, diferentes tipos de cáncer y otras enfermedades que pueden no ser un gran problema en otras partes del mundo, pero son importantes problemas de salud en África.
Según John Nkengasong, director de los Centros Africanos para el Control y la Prevención de Enfermedades, la nueva instalación ayudará a abordar los desafíos de salud pública que enfrenta el continente.
