El expresidente de Burkina Faso, Blaise Compaore, ha pedido disculpas a la familia de su predecesor, Thomas Sankara, de cuyo asesinato en 1987 le declaró cómplice un tribunal militar a principios de este año.
Compaore fue condenado en abril en rebeldía a cadena perpetua por el asesinato, ocurrido durante el golpe de Estado que le llevó al poder. Gobernó durante 27 años antes de huir a Costa de Marfil durante una revuelta en 2014.
A pesar de su condena, Compaore regresó del exilio durante unos días a principios de este mes para participar en una cumbre de expresidentes organizada por la junta militar gobernante. Muchos burkineses se enfurecieron al verlo regresar como un hombre libre.
Compaore siempre ha negado su implicación en el asesinato de Sankara y no asumió directamente su responsabilidad en la carta, que fue leída el martes por un portavoz del Gobierno burkinés.
«Pido perdón al pueblo de Burkina Faso por todos los actos que haya podido cometer durante mi mandato, y muy especialmente a la familia de mi hermano y amigo Thomas Isidore Noel Sankara», decía la carta.
«Ante la dramática y crítica situación a la que se enfrenta nuestra querida patria, no tenemos más remedio que acallar nuestras diferencias para salvar nuestro patrimonio común, Burkina Faso», decía.
El país se enfrenta a una insurgencia cada vez más profunda por parte de militantes islamistas que ha desplazado a casi dos millones de personas. La frustración por la incapacidad del gobierno para sofocar siete años de violencia contribuyó a impulsar un golpe militar en enero.