Ossouka Raponda, de 56 años, es el sexto primer ministro nombrado desde que Bongo sucedió a su padre en 2009. Su primer trabajo es formar un nuevo gobierno después de que su predecesor, Julien Nkoghe Bekale, renunciara más temprano en el día.
Asumirá dos desafíos principales: la disminución de la producción y los precios del petróleo, que han influido en el crecimiento en los últimos años, y la pandemia de COVID-19. El país centroafricano ha registrado casi 6,000 casos hasta la fecha.
Ossouka Raponda también tendrá que navegar por una delicada escena política que se sacudió cuando Bongo, de 61 años, sufrió un derrame cerebral en 2018, seguido de una larga licencia médica en el extranjero, durante la cual hubo un breve intento de golpe.
La recuperación de Bongo ha sido lenta y las apariciones raras en televisión muestran que todavía tiene dificultades para caminar.
Ossouka Raponda fue nombrada ministra de presupuesto hace ocho años antes de ser elegida alcaldesa de la capital, Libreville, en 2014, convirtiéndose en la primera mujer en ocupar ese cargo desde 1956. Se ha desempeñado como ministra de defensa desde febrero de 2019.