«Hemos robado varias botellas de Wisky, mi amigo y yo, pero no sabíamos que las cámaras de seguridad estaban instaladas en el supermercado», decía uno de los detenidos. No han negado los hechos por los que se les acusan. Los mismos habrían robado varias botellas de vino y otros licores de calidad.
Los dos supuestos ladrones volvieron al supermercado Champions para realizar la misma operación por segunda vez, sin embargo, la suerte no volvió a estar a su favor ya que las cámaras de seguridad han sido claves para la gendarmería en la detención de estos dos sujetos.
Uno de los responsables del supermercado explica cuál era el módus-operándi de los supuestos ladrones señalando que «tenían una estrategia, cuando uno entra en el supermercado roba primero las botellas y los mete dentro de sus pantalones, después coge un artículo de mil o dos mil francos, luego se presenta en la caja. Se le factura lo que tiene en las manos, pero teniendo los licores escondidos».
El supermercado pide a la gendarmería la recuperación de 6 millones ochocientos diez mil que es la factura de lo que han robado.