Este 19 de mayo se conmemora el Día Mundial del Médico de Familia, para dar un merecido homenaje a aquellos especialistas en Medicina de Familia y Comunitaria que brindan asistencia médica integral a las personas, para el diagnóstico precoz y prevención de enfermedades, tratamientos, rehabilitación y cuidados paliativos. Una figura que en Guinea Ecuatorial no está siendo notoria, de acuerdo al sistema sanitario que apenas sigue planteando la posibilidad de implementar una Atención Primaria de Salud competente y constante.
«Todavía estamos un poco lejos para visibilizar esta figura, porque seguimos creyendo que la atención primaria de salud y el personal que trabaja en la comunidad es de mala calidad o de segunda clase. Tenemos que descentralizar los hospitales y la hegemonía de los clínicos para concienciar para que no estemos solo para curar a los enfermos», sostiene el director general de Salud Pública, Dr. Florentino Abaga.
El doctor prosigue señalando que «dentro del plan de operacionalización del distrito y del plan sanitario, basado en la atención primaria de salud, queremos recuperar esta estructura de estrategia de médico de familia que se logró en los años 80 donde los servicios llegaban hasta la comunidad». La finalidad es que cada número determinado de población tenga un médico que vele por la salud de ellos, no solo en aspectos curativos.
Los sistemas de salud más avanzados son los que han establecido la figura de médico de familia, donde alrededor del 80% de los recursos tienen que ir a la medicina preventiva. «Nosotros lo tenemos al revés, actualmente nuestro sistema de salud está basado en medicina curativa, que implica esperar a los pacientes en el hospital para ser curados. El médico de familia nace para garantizar la prevención para que no haya sufrimiento de enfermedades que se podía haber prevenido», asevera el doctor.
La estrategia de operacionalización ideado por el Ministerio de Sanidad tiende a alcanzar la institucionalización del médico de familia, pero no es un proceso inmediato, sino relativamente largo en alcanzar.
Quiere lograr que los servicios sanitarios no solo estén en los hospitales, sino que también alcancen a la comunidad.
«Es una de las líneas de acción para reforzar a los centros de salud, estos no tienen que convertirse en pequeñas clínicas, tienen que dedicar el 80% de su esfuerzo hacia la comunidad. Eso sí, tiene que haber en su alrededor consultorios médicos, lo cual no hemos madurado. Vale implementar la figura del médico de familia porque va a ayudar a la población».
Lo que se necesita
El Dr. Florentino sostiene que el problema está en la estructura del sistema de salud, ya que en el país estamos arrastrando una estructura antigua y se quiere transformarla a través de la operacionalización del distrito. «Lo que se necesita es la adopción de un estudio nacional del ratio poblacional por consultorio y que el ministerio haga una propuesta al Gobierno para la construcción de consultorios de médicos de familia, capacitar a los médicos y dotarles de recursos. Si seguimos en esta posición dinámica creo que llegaremos a la medicina familiar.
El facultativo defiende la idea de que, es buena la medicina curativa, pero «debemos derrochar más esfuerzo en la medicina preventiva, para que la gente no siga muriendo de enfermedades de forma innecesaria, y para que esto ocurra debemos ir por los médicos de familia, algo que no está desarrollado todavía en nuestro país».
Como recomendación, recuerda a la población la necesidad de tener acceso a fuentes fiables de información, creer en la ciencia que nos da la luz sobre los problemas de salud, y hacer caso a las recomendaciones médicas porque, «al creer que todo sucede por mala suerte, no adoptaremos mecanismos de prevención».