Nuevas dinámicas en China, nuevas oportunidades en África

La nueva dinámica de desarrollo de China es un tema de gran actualidad. Una dinámica basada en el rol de pilar del circuito doméstico y el fortalecimiento mutuo de los circuitos nacionales e internacionales. Se describió en el decimocuarto plan quinquenal de China para el período 2021-2025, establecido por un pleno del Partido Comunista de China en octubre, que describió las perspectivas para 2035, cuando China se habrá completado para el período. modernización socialista esencial.

¿En qué consiste esta “nueva dinámica”? ¿Qué significa para el mundo?

Esta nueva dinámica contribuye al desarrollo de la calidad. Durante más de 40 años, especialmente desde su adhesión a la OMC en 2001, China ha participado activamente en el circuito económico internacional. Las exportaciones basadas en la financiación y el mercado extranjeros hicieron la reputación del gigante manufacturero asiático. Pero hoy China está cambiando: su PIB per cápita supera los 10.000 dólares. Ha llegado a una etapa en la que debe depender más de la innovación para evitar la trampa de los ingresos medios y lograr la mejora de su economía.

Esta nueva dinámica también es una respuesta a un entorno internacional que cambia rápidamente. La economía mundial ya no es la de la crisis financiera de 2008. El auge del populismo y el proteccionismo debilita la globalización. Agregue a esto la interrupción de las cadenas industriales y de suministro globales, exacerbada por COVID-19. Para un país como China, es importante fortalecer su resiliencia económica desarrollando el circuito interno.

Esta nueva dinámica responde sobre todo a la necesidad inherente del gran y prometedor mercado chino. El consumo se ha convertido en el principal motor del crecimiento del país durante los últimos seis años, ya que la clase media, 400 millones de habitantes, desata su poder adquisitivo. Este año, se espera que China se convierta en el mercado minorista más grande del mundo. Esta fuerte demanda interna atrae capital y productos extranjeros y abrirá nuevas perspectivas para la interacción de China con el mundo, lo que a su vez impulsará las actividades económicas internas, de ahí el fortalecimiento mutuo de los dos circuitos.

Una cosa es cierta: esta nueva dinámica no consiste en desarrollar un circuito doméstico cerrado, sino en potenciar tanto los circuitos nacionales como internacionales y promover una mayor apertura. La Tercera Exposición Internacional de Importaciones de China selló acuerdos por valor de más de $ 72 mil millones. El sector financiero está mucho más abierto después de la eliminación de las restricciones a la participación de capital extranjero un año antes de lo esperado.

Mientras China mira hacia el futuro, África está acelerando la implementación de su Agenda 2063 para un África fuerte y próspera. La reciente sesión extraordinaria de la Asamblea de la UA adoptó una decisión sobre el inicio del comercio en el marco de la Zona de Libre Comercio Continental Africana el 1 de enero de 2021. Un hito importante en el proceso de integración del continente africano . Con lo cual se crearía un vasto mercado que abarcaría a más de 1.300 millones de personas y un PIB total de 2.5 billones de dólares. Esto tendrá un impacto profundo en la cooperación chino-africana y traerá nuevas oportunidades para construir una comunidad futura compartida entre China y África aún más fuerte.

China da la bienvenida a la construcción del AfCFTA. Depende de China y África aprovechar las oportunidades de desarrollo de cada uno y lograr una cooperación de beneficio mutuo. En 2019, el volumen de comercio entre China y África fue de $ 208,7 mil millones, 20 veces más que en 2000, y China se ha convertido en el país socio comercial más grande de África para el undécimo año consecutivo. China y África pueden aprovechar sus respectivas fortalezas en áreas más amplias, aumentando el volumen total de comercio e inversión. China desea promover sinergias con la estrategia de desarrollo de África. Seguirá apoyando a África en la construcción de infraestructura, el proceso de industrialización y el fortalecimiento de sus capacidades de autodesarrollo. Es importante profundizar la cooperación en el libre comercio y la integración de las cadenas industriales y de suministro, e intensificar la cooperación en el marco de la Iniciativa de la Franja y la Ruta para ayudar África para aprovechar mejor el mercado chino e integrarse mejor en el circuito económico internacional.

China, que está experimentando una nueva dinámica de desarrollo, y África entrando en una nueva etapa de desarrollo, se ofrecen mutuamente importantes oportunidades. Ha llegado el momento de trabajar juntos, aprovechando las oportunidades, por un futuro compartido y más brillante.

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