Después de varias reuniones de felicitación entre los catorce magistrados y el fiscal jefe del Tribunal de Cuentas recientemente constituido en la República de Guinea Ecuatorial, los presidentes de las dos cámaras que conforman el Parlamento han mantenido un encuentro conjunto con los miembros de este órgano de nueva creación en la sala polivalente del Senado.
El encuentro cuyo objetivo era conformar el cuadro de los altos funcionarios de la nueva institución del Tribunal de Cuentas, y elegir entre los quince miembros recientemente nombrados, comenzó con la presentación de los elegidos, quienes pusieron de relieve el perfil profesional que dispone cada uno.
Como establece la Ley Orgánica Número 5/2012, de fecha 16 de noviembre, que regula el Tribunal de Cuentas en su artículo 32, los magistrados de este órgano constitucional del Estado son independientes e inamovibles. Serán nombrados por el presidente de la república a propuesta del Parlamento, siete por la Cámara de los Diputados, siete por el Senado mediante votación por mayoría cualificada de los miembros de las mesas de las dos cámaras a los que se suma el fiscal jefe propuesto por el Ministerio de Justicia, Culto e Instituciones Penitenciarias, por un periodo de cinco años.
Posteriormente, se procedió a la votación para elegir al presidente, donde resultó electo por unanimidad el vocal segundo de la mesa del Senado, Melchor Esono Edjo, como presidente del Tribunal de Cuentas de la República de Guinea Ecuatorial, cuya responsabilidad queda pendiente de ratificación por el presidente de la república, Obiang Nguema Mbasogo, teniendo en cuenta que a partir de la fecha deja el escaño de senador.
En sus palabras, los presidentes de las Cámaras Alta y Baja del Parlamento Nacional, Teresa Efua Asangono y Gaudencio Mohaba Mesu, además de sus felicitaciones, hicieron ver a los magistrados y al fiscal jefe elegidos, que la tarea que van a realizar es de gran responsabilidad constitucional porque se trata de una institución que dará credibilidad y transparencia en la gestión de los fondos públicos y cuya misión se centrará en ejercer el control fiscal de la Administración y de los particulares o entidades que manejan los fondos o bienes públicos.