Teodoro Nguema Obiang Mangue felicita las labores de la «Operación Limpieza» y encarga una nueva misión a los Ministerios de Defensa y Seguridad Nacional. Ha sido en el Consejo Directivo que el miembro del Gobierno mantuvo ayer miércoles en el Palacio del Pueblo en Malabo con los departamentos a su cargo.
Después de tres semanas de tranquilidad en la población tras la detención de más de 400 supuestos delincuentes en Malabo, y a la espera de un plan agresivo para la parte continental del país, Nguema Obiang Mangue ha mandatado que se identifique a los productores y vendedores de marihuana en Guinea Ecuatorial y que se queme sus plantaciones de forma inmediata.
Al constatar que la mayor parte de los jóvenes detenidos hasta ahora actúan bajo los efectos de estupefacientes, el encargado de Defensa y Seguridad considera que se debe actuar desde la base. Con esta medida, Nguema Obiang Mangue ha mandatado que sea inmediata la actuación de los cuerpos del orden público en la destrucción de las plantaciones y detención de los vendedores. Una acción que entra en el plan del Gobierno para la lucha contra las bandas criminales en el país.
En otro contexto, el vicepresidente ha mostrado su indignación por el uso de las luces y sirenas de policía por ciertos ciudadanos cuyos vehículos no están autorizados a llevarlos.
Para ello, ha ordenado al Ministerio de Seguridad, por una parte, a registrar todos los vehículos oficiales autorizados y, por otra parte, conceder un tiempo prudencial de dos semanas para que los dueños de los vehículos particulares puedan retirar esos accesorios de sus coches. Pasado ese tiempo, cualquier vehículo no autorizado que los lleve será retenido y su propietario será penalizado con una multa de 5 millones de francos cefas.