EEUU, en vilo: toque de queda en Washington tras la invasión del Capitolio por trumpistas

Los seguidores de Trump han conseguido avanzar tras las líneas de la policía y entrar dentro del Capitolio, donde se estaba celebrando la sesión del Congreso para ratificar a Biden como presidente

En un día sin precedentes en la historia de la democracia de Estados Unidos, el Capitolio ha sido invadido por seguidores de Donald Trump. Cientos de manifestantes, que habían rodeado el Congreso a modo de protesta y jaleados por Trump ante la certificación de resultados que debía ratificar a Joe Biden como presidente, consiguieron romper el cerco de la policía, atravesar varias vallas y entrar dentro del edificio. La seguridad del Capitolio decidió paralizar la sesión conjunta del Senado y Agentes del Servicio Secreto evacuaron inmediatamente al vicepresidente Mike Pence. «Esto es un intento de golpe de Estado», tuiteó Adam Kinzinger, congresista republicano por Illinois. Cuatro horas después y tras movilizar a la Guardia Nacional, las autoridades han conseguido «controlar» el Capitolio tras un asalto popular que se acabó cobrando la vida de una mujer.

Decenas de manifestantes consiguieron entrar dentro de la Cámara alrededor de las 14:00 horas de este miércoles. «Trump ganó las elecciones», gritó uno de los seguidores de Trump que consiguió subirse a la tribuna de oradores, en referencia al supuesto fraude electoral que alegan los trumpistas. En las últimas horas, la turba se adentró en los pasillos del Capitolio, rompiendo ventanas y pintando las paredes de despachos como el de Nancy Pelosi, líder demócrata de la Cámara de Representantes.

Para frenar el descontrol, Washington D.C. ha decretado el toque de queda en la ciudad a partir de las 18:00 hora local y, tras una vacilación que ha durado varias horas, el Departamento de Defensa autorizó el envío de 1.100 efectivos de la Guardia Nacional para frenar el asalto al Capitolio y desalojar el edificio. Según el jefe de policía de Washington D.C, Robert J. Contee, las autoridades han encontrado por lo menos cinco armas dentro del Capitolio. Ante el caos y el miedo que se apropió de la primera potencia del mundo, el presidente-electo dio un discurso ante la nación para urgir a Donald Trump a pedir a sus seguidores que se fueran del Capitolio.

Hago un llamado al presidente Trump para que salga a la televisión nacional ahora mismo para cumplir su juramento, defender la constitución y exigir el fin de este asedio», manifestó el presidente electo estadounidense, Joe Biden. «Vamos a mantenernos firmes y vamos a superar esto», ha afirmado.

En Twitter, Trump ha pedido a los manifestantes que siguieran las indicaciones de la Policía y de las fuerzas del orden para tratar de rebajar el caos en la capital de la primera potencia del mundo. «Están de nuestro lado. ¡Manteneos pacíficos!», ha escrito el todavía presidente de EEUU. Media hora después ha vuelto a tuitear pidiendo calma. «Pido a todo el mundo en el Capitolio que permanezca pacífico. ¡Nada de violencia! Recordad, somos el Partido de Ley y Orden, respetar la Ley y a nuestros hombres y mujeres de azul [en referencia a la Policía]. ¡Gracias!». Pasadas las seis de la tarde en Washington D.C, Trump publicó un vídeo en el que volvía a hacer un llamamiento por la retirada pacífica de los manifestantes pero, al mismo tiempo, subrayando un fraude del que no se ha encontrado ninguna evidencia.

Las imágenes que están circulando por redes sociales muestran cómo los seguidores del magnate se encaran con los agentes que conforman la barrera policial de seguridad y son repelidos con gases lacrimógenos por la Policía. Además, otras emitidas por la CNN muestran a varios agentes del Servicio Secreto apuntando con sus pistolas a una puerta cerrada por la que asoma un manifestante armado.

La protesta había comenzado esta mañana con el nombre de «Salvar a EEUU» en frente de la Casa Blanca, según la agencia EFE. A mediodía, Trump azuzó a las masas congregadas en la capital del país prometiéndoles que «nunca» concedería la derrota, urgiendo a sus seguidores a marchar hacia el Congreso. «Si no lucháis hasta el final no vais a poder disfrutar de este país nunca más». A partir de las 14:00 horas, los manifestantes trataron de romper el cordón policial al grito de «déjadnos entrar, dejadnos entrar».

Algunos políticos del Partido Republicano se han movilizado para criticar a Donald Trump y responsabilizarle de lo que ha pasado en el Capitolio. Ben Sasse, senador republicano por Nebraska, fue uno de los más críticos con el magnate: «Hoy, el Capitolio de Estados Unidos —el mayor símbolo de autogobierno del mundo— fue saqueado mientras el líder del mundo libre se escondía temerosamente detrás de su teclado”. El legislador también señaló directamente al mandatario como responsable del caos en la capital, al escribir que “las mentiras tienen consecuencias”.

Intento de revertir resultados

Horas antes, dentro del Senado Mike Pence se había negado a seguir al presidente en su huida hacia delante para rechazar la victoria de Joe Biden en las elecciones del pasado noviembre. «Mike Pence no ha tenido el valor de hacer lo que tenía que hacer para proteger al país y a nuestra Constitución, dando a los Estados la oportunidad de certificar una serie de hechos corregidos, no fraudulentos ni incorrectos que les pidieron certificar previamente. ¡EE UU reclama la verdad!», había tuiteado Trump antes de que la turba consiguiera entrar dentro del Capitolio.

El líder de la mayoría republicana en la Cámara Baja, Mitch McConnell, también había desestimado el plan de Trump asegurando que no había existido fraude alguno. «Colegas, nada ante nosotros prueba la ilegalidad ni siquiera cerca de la masiva escala, la escala masiva que habría inclinado toda la elección. Ni la duda pública por sí sola puede justificar una ruptura radical cuando la duda misma fue incitada sin ninguna evidencia.

 

Salir de la versión móvil