Los agentes de tráfico y la policía local podrían tener los días contados por las irregularidades que cometen en las vías públicas de las dos grandes urbes del país. Cabe destacar que la población viene denunciando día tras día, los múltiples atropellos que sufren a diario de parte de los agentes de tráficos y la policía local.
De hecho, este miércoles, el vicepresidente ha mandatado convocar una reunión entre el Ministerio de Seguridad, Tráfico y el Ayuntamiento, para poner limitaciones del trabajo que le corresponde a cada departamento en las vías públicas y advertirles de que cesen con el maltrato que dan a la población constantemente. En caso contrario, serán llevados ante los tribunales.
He mandatado convocar una reunión entre Seguridad, Tráfico y Ayuntamiento para delimitar sus funciones en las vías públicas. Y, sobre todo, transmitirles una seria advertencia de cesar el maltrato que dan a la población; de lo contrario, responderán ante los tribunales militares.
— teddy nguema (@teonguema) May 31, 2023
Son varios los antecedentes entre la población y los tráficos. El año pasado, el alcalde de Bata llamó la atención a los tráficos de esta ciudad, mostrando su indignación por los comportamientos corruptos que dan a los taxistas.
En el mes de junio pasado, el vicepresidente de la República de Guinea Ecuatorial anunció en su cuenta de Twitter que se centrará en las labores de la policía de tráfico, tras varias denuncias de abusos formuladas por la población. Nguema Obiang prometió a la población que, para llevar a cabo esta operación necesitaría la colaboración de todos y que, a través de una plataforma, se denunciaría cualquier maltrato en una vía pública. No obstante, esto no se materializó.
Sin embargo, esta vez, Nguema Obiang Mangue vuelve a centrar su atención en los tráficos y podría haber soluciones, dependiente de lo que se aborde en la reunión convocada por el vicepresidente con Seguridad, Tráfico y Ayuntamiento; ya que la policía de tráfico presenta una imagen de una institución vulnerable a la corrupción en varios niveles y esto se refleja en la percepción de los ciudadanos, en particular los propietarios de vehículos, conductores y los taxistas no tienen buena imagen de los tráficos, porque se ven afectados por la corrupción, posibles sanciones inventadas, amenazas, entre otros casos.