Sanidad pone mano dura en las farmacias, las cuales, aunque son establecimientos saniatarios de gestión privada, pero de interés público, están sujetas a las normas del ministerio de Sanidad. En una reciente reunión entre el Ministerio de Sanidad y los responsables de farmacias de Malabo, Antonio Martín Elo Elo, Viceministro del departamento instó a los presentes a ser responsables en la gestión de sus farmacias, «que tenga una farmacia la persona que puede», insistió el Viceministro, enfatizando que las inspecciones que darán inicio el próximo 1 de marzo serán más rigurosas y aquellas que no cumplan con las normativas estipuladas serán precintadas. Elo Elo también destacó la importancia de que solo personas capacitadas y responsables gestionen farmacias. “No podemos jugar con la salud de las personas”, enfatizó, añadiendo que la salud pública es una prioridad.
Las inspecciones se centrarán en varios aspectos clave: Se exigirá la copia original de la autorización para operar como farmacia, se evaluará el estado de limpieza del local, así como la verificación de la procedencia y calidad de los medicamentos en venta. Para ello la comisión exigirá facturas de medicamentos. La farmacia que no las presente, se incautará estos medicamentos porque serían de dudosa procedencia.
Joana Bocobo, Directora de CENTRAMED, subrayó que las inspecciones serán exhaustivas. “Quien no presente la autorización original será precintado”, advirtió. Además, se pedirán facturas de compra para asegurar la procedencia de los medicamentos. “Medicamentos de dudosa procedencia serán incautados”, afirmó, haciendo hincapié en la importancia de la higiene en los establecimientos.
Bocobo también instó a los farmacéuticos a leer detenidamente la Ley del Medicamentos, que establece los procedimientos necesarios para mantener una farmacia en condiciones óptimas.