La vacuna contra el Covid-19 no estará posiblemente disponible antes de 12 o 18 meses tras conocerse los primeros casos, acelerando con ello un proceso que suele abarcar varios años. Farmacéuticas de China, Estados Unidos, Rusia y la UE rivalizan en la búsqueda de una vacuna eficaz, pero ahora que los ensayos clínicos llegan a sus etapas finales, los gobiernos han emprendido otra carrera para hacerse con millones de dosis para sus ciudadanos, sorteando así la posible escasez de vacunas por la sobredemanda y la escasa producción. Estados Unidos y Reino Unido encabezan esta carrera de compras. El importe de la mayoría de los acuerdos, que incluyen ayudas para continuar la investigación o para fabricar la vacuna en el país, no ha sido desvelado pero sólo Estados Unidos lleva invertidos cerca de 10.000 millones de dólares.
Reino Unido firmó el viernes dos nuevos acuerdos. El primero con la farmacéutica americana Novavax, a quien comprará 60 millones de dosis para un ensayo en Fase 3, que evaluará su eficacia en un estudio a partir de 2021 con 9.000 adultos. Novavax se asociará con Fujifilm Diosynth Biotechnologies para fabricar en el país el componente antígeno de la vacuna, con la previsión de unos 180 millones de dosis anuales.
El segundo, con Johnson &Johnson. Su división Janssen Pharmaceuticals proporcionará a Reino Unido 30 millones de dosis sin ánimo de lucro, con opción de compra de 22 millones más. También colaborarán en los ensayos en Fase 3 de la vacuna.
Seis grandes acuerdos
Reino Unido suma ya seis grandes acuerdos que le aseguran casi 400 millones de dosis de diferentes vacunas, tras los alcanzados con la británica GSK y la francesa Sanofi(60 millones de dosis), con la Universidad de Oxford y AstraZeneca (100 millones de dosis y 72,5 millones de euros para investigación), con la americana Pfizer y la alemana BioNTech (30 millones de dosis ) y con la francesa Valneva (hasta 100 millones de dosis que se producirán en Escocia). Además, la farmacéutica india Wockhardt hará en Gales el proceso de llenado y acabado de millones de dosis de múltiples vacunas del Covid para Reino Unido.
Estados Unidos también ha acelerado los contratos en los últimos días, tras anunciar Rusia que ha finalizado su vacuna (Sputnik V), un proceso del que recela la comunidad científica y la OMS, que ha preferido no valorar su seguridad y ha pedido al Gobierno de Vladímir Putin que le informe sobre su proceso de desarrollo. De momento, Vietnam, que trabaja en su propia vacuna, anunció un pedido de entre 50 y 150 millones de dosis de la Sputnik V.
El último acuerdo de Donald Trump ha sido con Moderna, a la que pagará 1.530 millones de dólares por fabricar y entregar 100 millones de dosis de su vacuna una vez esté aprobada. La Administración Trump ha comprado 100 millones de dosis a Pfizer-BioNTech por 1.950 millones de dólares; 300 millones a AstraZeneca (a la que Oxford licenció la vacuna en abril) por 1.200 millones de dólares; 100 millones de dosis iniciales a J&J por 1.000 millones de dólares; 100 millones con opción a otros 500 a Sanofi-GSK por 2.100 millones de dólares; y 100 millones a Novavax por 1.600 millones de dólares.
La UE ha dado también pasos. Ayer viernes cerró la compra de 300 millones de dosis de la potencial vacuna de AstraZeneca y Oxford, con opción por 100 millones de dosis más, por un precio no revelado. Se trata, según el Ejecutivo comunitario, que negocia en nombre de los 27 Estados, del primer acuerdo de compra anticipada. El jueves se anunció la posible compra de 200 millones de dosis a J&J, con opción a otros 200 millones, si su vacuna demuestra ser segura y eficaz. En julio concluyó las negociaciones con Sanofi para reservar 300 millones de dosis de su vacuna. Mientras, negocia el acceso a las de Pfizer, Moderna y CureVac. El pacto con AstraZeneca llega tras el alcanzado en junio por la farmacéutica británica y la Inclusive Vaccines Alliance (IVA) de Europa, un grupo formado por Francia, Alemania, Italia y Países Bajos, abierto a otros países, para el suministro de 400 millones de dosis.
De Suiza a Japón
Otros países han negociado asimismo hacerse con un tratamiento. Es el caso de Suiza, que ha comprado 4,5 millones de dosis a Moderna, asignando a ello un presupuesto de 270 millones de euros.
El Gobierno de Japón ha comprado 120 millones de dosis a Pfizer-BioNTech, que entregarían en el primer semestre de 2021, así como otros 120 millones de dosis a AstraZeneca, mientras que negocia con Johnson &Johnson. La farmacéutica nipona Takeda, por su parte, fabricará y venderá anualmente hasta 250 millones de dosis de la vacuna de Novavax en Japón.
AstraZeneca ha acordado con los gobiernos de Argentina y México fabricar allí hasta 400 millones es de dosis de su vacuna para América Latina. Moderna y Pfizer-BioNTech suministrarán, asimismo, millones de dosis de sus vacunas a Canadá en caso de que sean aprobadas. Israel fue uno de los primeros países que firmó un acuerdo de suministro con Moderna, al igual que otro con la farmacéutica californiana Arcturus Therapeutics.