Este fin de semana, el Centro Cultural Ecuatoguineano de Malabo se convertía en el escenario de la presentación de la segunda novela del escritor José Ntutumu Edú: “Un camino hacia dos destinos”.
La tarde, que amagaba tormenta, estuvo marcada por la gran concentración de personalidades que arroparon al antiguo miembro del Gobierno encargado de la Coordinación Hospitalaria; ahora volcado en su carrera literaria. Y que tras su primera novela, que estaba dedicada a su madre, titulada: “La abuela Eyang” sorprende con una novela novedosa que tiene como eje principal la victoria del amor sobre todas las cosas y como vehículo fundamental de la raza humana, la cual es la única que reconoce el autor, sin distinción de religiones o latitudes.
El evento estuvo presentado por Mariano Mbomio, quien dio al público presente unas pinceladas sobre el objeto de la novela, protagonizada por la historia de “Edú y Mayra”, en la isla de Formosa, actual Bioko, en época de la colonia; a quien precedió la presentación del autor por parte de Josué Esono Edú, hijo del autor y exdirector general de Parque Museos y Bibliotecas, que por su parentesco y trayectoria profesional, supo explicar al auditorio de la importancia de las letras ecuatoguineanas, que últimamente están ganando enteros con la incursión plena de muchos nacionales a la carrera profesional de la escritura.
En ese sentido, se explicó que la persistencia y personalidad del autor han sido la clave para que estas obras hayan podido alumbrarse en el país, y que contribuyan a la expansión de la visión de la idiosincrasia nacional, y como el choque de culturas, en las que el autor ha convivido toda su vida impregnan una novela, que no está exenta de los aspectos culturales y tradicionales, que de no quedar reflejadas en la literatura, estarían condenadas a la desaparición total.
Tras estas presentaciones, tanto de su obra como del autor en sí, le tocó el turno al autor, quien haciendo gala de su discreción personal dio un discurso breve en el que evocó todo aquello que le ha inspirado a la realización de la obra, y de el porqué es necesario proyectar la cultura ecuatoguineana mediante la literatura.
Por último, tras todas las intervenciones de los representantes de la mesa, se pasó al turno de preguntas, en las que el auditorio tiró de la lengua al autor, para que revelara cómo realiza su proceso creativo, y cuanto de él y de su existencia se refleja en el libro, que sobre todo trata de como la mezcla de culturas es siempre posible bajo el paraguas del amor y del respeto, sin importar ninguna otra condición.
Como colofón final, el autor regaló libros al auditorio con dedicatoria personal, a la vez que pudo departir, ya en un tono más relajado con muchas de las personas que en la tarde de ayer se acercaron al Centro Cultural Ecuatoguineano para conocer tanto al autor como a la obra del mismo.
