Según un comunicado de prensa publicado recientemente por el Banco de Estados de África Central (BEAC), el Comité del Mercado Monetario (CMM) decidió, en su sesión ordinaria en febrero de 2020, activar las operaciones de recuperación liquidez en la zona de CEMAC (Camerún, República Centroafricana, Congo, Gabón, Guinea Ecuatorial y Chad).
Concretamente, especialmente a través de la venta a los bancos públicos de valores públicos (como bonos del Tesoro asimilados) que posee o mediante la emisión de valores específicos, BEAC reducirá la liquidez del sistema bancario. Objetivo: «esterilizar las reservas ociosas observadas y contener mejor los riesgos que pesan sobre la estabilidad monetaria », explica el Banco Central.
El Fondo Monetario Internacional (FMI), que impulsó esta operación, cree que el sistema bancario tiene un exceso de liquidez. Como resultado, argumenta el FMI, la liquidez no utilizada fácilmente podría conducir a salidas de capital si la transmisión de la política monetaria no se fortaleciera (las tasas de interés de los depósitos bancarios habrían permanecido prácticamente sin cambios después del alza en la tasa clave). Esto podría conducir a una caída en los activos externos de CEMAC y debilitar la moneda común (FCFA).
La institución de Bretton Woods incluso quería que la operación se iniciara en la segunda mitad de 2019. Pero BEAC se opuso, argumentando que la absorción del exceso de liquidez planteaba riesgos para el sistema bancario. Por lo tanto, optó por un enfoque gradual: acelerar la reducción de las inyecciones de liquidez desde julio de 2019; fin de la inyección de liquidez al final del mismo año y comienzo de la absorción de liquidez en febrero de 2020.
El Banco Central teme que la absorción de liquidez dificulte el desarrollo del mercado interbancario y debilite aún más a los bancos con problemas (incluidos los bancos de importancia sistémica). También teme que el costo de absorber liquidez le cause pérdidas operativas.
En julio de 2019, el nivel de las reservas de divisas se situó en 4.272,6 mil millones de FCFA frente a los 3.080,6 mil millones del año anterior, un aumento del 38,7%. La tasa de cobertura de divisas externas cayó del 55,98% al final Julio de 2018 a 66.21% un año después. Pero esta dinámica podría romperse con la desaceleración del crecimiento mundial debido a la epidemia de coronavirus y la tendencia a la baja en el precio del petróleo crudo.