La llegada de los neobancos revolucionó el panorama financiero. A pesar de ser entidades puramente digitales no paran de crecer, tanto en clientes como en productos de gestión, y se convierten en una auténtica alternativa a la banca tradicional.
Un claro ejemplo es el neobanco N26 que supera ya los 5 millones de clientes en todo el mundo.
En España duplicó el número de clientes durante 2019 hasta superar los 350.000. Este hito, que se produce al mismo tiempo que la entidad celebra su quinto aniversario, marca un momento clave en el crecimiento global de N26.
En estos cinco años N26 logró posicionarse como challenger bank líder, entrando en nuevas regiones como los Estados Unidos y aumentando de forma exponencial el número de clientes en todos los mercados europeos en los que está presente, incluyendo España.
Aunque no es el único neobanco que opera en España, ya que destacan el español BNext y Revolut.
Los neobancos van más allá de la digitalización
Pero, ¿qué son realmente los neobancos? Se podría decir que son entidades bancarias que utilizan la tecnología fintech, es decir tecnología financiera. Aunque estas últimas, las fintech, no son precisamente bancos, sino meramente intermediarios entre bancos y clientes.
Esto hace que no todos los neobancos tengan ficha bancaria. De hecho la mayoría de ellos no la tienen aunque presten los mismos servicios que una entidad bancaria. Esto requiere de terceros para poder operar con total normalidad.
Lo novedoso de los ‘neobancos’ es su foco en ofrecer una mejor experiencia a los clientes, con más cercanía a través del móvil o de otros canales no presenciales, y su énfasis en la transparencia y reducción de las comisiones.
¿Los neobancos son una alternativa a la banca tradicional?
La pregunta que se puede hacer el cliente es si un neobanco puede ser una alternativa real a un banco tradicional.
Al respecto, Antonio Gallardo, experto financiero de iAhorro, señala que “si pensamos en un banco que cubra todos los servicios no lo es”.
Precisamente esta la idea más clásica que aún se sigue teniendo de los bancos, pero si se cambia esa perspectiva hacia otra en la que ofrezcan las mejores ofertas sí puede volverse una alternativa.
Estefía González, portavoz de finanzas personales de Kelisto, explica que «se especializan en determinados productos financieros y que su ‘medio ambiente’ es Internet».
Además, al tratarse de compañías más pequeñas que un banco tradicional, tienen más agilidad para aplicar cambios y mejoras en sus procesos, y para testar distintas tecnologías/ofertas, etc, lo que les permite responder más rápido a ciertas necesidades del cliente que un banco tradicional.
Por lo tanto, los neobancos se centran normalmente en servicios bancarios básicos: cuenta corriente para realizar pagos y especialmente en tarjetas de pago, débito y crédito.
Es cierto que estos servicios son pilares básicos en la relación con las entidades financieras, pero cuando profundizamos en necesidades son insuficientes.
Los jóvenes, más favorables a un neobanco
La limitación en los productos que ofrece hace que los neobancos triunfen fundamentalmente entre los más jóvenes, ya que cubren todas sus necesidades y cuesta por ello calar en perfiles de personas de mayor edad porque los ven, al menos momentáneamente, insuficientes, expone Gallardo.
Esto hace que bancos tradicionales apuesten por desarrollar ofertas para llegar a este tipo de públicos, que de otra manera, no podrían.
Es el caso de Imagin desarrollado por CaixaBank, que oferta una cuenta sin comisiones.
Neobancos o la simplificación de la actividad financiera
El hecho de que la actividad financiera se digitalice al máximo hace que la prestación de los servicios en la mayoría de los casos sea sencilla.
Gallardo insiste en que la principal ventaja “es permitir un acceso más sencillo a los servicios bancarios, ayudando a la inclusión financiera, y con un estilo muy moderno especialmente para la gente joven”.
Sus herramientas muy adaptadas a smartphones, por ejemplo, ayudan a un mayor control financiero por los usuarios.
Asimismo, ofrecen comisiones más bajas que el resto de entidades financieras.
Además, señalan desde HelpMyCash.com, estas entidades ofrecen servicios muy útiles como cuentas multidivisas, transferencias internacionales más baratas o ventajas para viajar.
En todo caso, en un momento de concentración bancaria como la actual ayudan dinamizando el mercado con más competencia.
Un claro ejemplo es MyInvestor, el neobanco de Andbank, que es una alternativa clara en subrogación de hipotecas, a través de la firma de acuerdos, así como en la comercialización de fondos.
Las limitaciones de los neobancos
El problema es que para muchos clientes la oferta puede ser incompleta especialmente cuando se necesita financiación o se tiene dinero para invertir.
Gallardo añade otros problemas. “En otro tipo de países su entrada es más sencilla porque si tienen mucho más asumido repartir sus servicios financieros entre distintas entidades: un banco para el día a día, otro especializado en hipotecas, otro para inversiones…”
Este modelo es más rico en competencia y es posible que gracias a la entrada de nuevos operadores en el largo plazo el sistema financiero se acerque a una mayor pluralidad, concluye Gallardo.