El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, ha anunciado que dimitirá en un plazo de 14 días para evitar lo que considera que serían «meses de controversias políticas y legales» derivadas de las investigaciones contra él por presunto acoso sexual, que ha puesto en cuestión a pesar de que al mismo tiempo asume su «plena responsabilidad» si alguna mujer se sintió molesta por sus actitudes.
«Dadas las circunstancias, lo mejor que puedo hacer para ayudar es echarme a un lado y dejar que el Gobierno vuelva a gobernar», ha dicho Cuomo en su primera comparecencia pública tras el anuncio de la Fiscalía de unas pesquisas que han puesto en cuestión su trato hacia las mujeres de su entorno durante los últimos años.
Cuomo ha explicado que en un momento como el actual, marcado por la pandemia de la COVID-19, «el gobierno tiene que estar funcionando» y no se puede «gastar energía en distracciones», anticipando lo que está por venir si siguen saliendo a la luz nuevos testimonios y se estrecha el cerco judicial sobre él.
El gobernador se ha disculpado si alguna mujer se ha sentido ofendida por sus comportamientos, pero ha alegado que el informe de la Fiscalía, que alude a once supuestas víctimas, es «falso». En este sentido, ha reconocido que su «instinto» inicial fue «luchar» frente a una causa que considera «motivada políticamente».