La efeméride pretende promover el establecimiento de sistemas e infraestructuras, destinadas a incrementar esta acción humanitaria y productos sanguíneos seguros para transfusiones, con el apoyo de los gobiernos y las autoridades sanitarias.
En la jornada se conmemora el nacimiento de Karl Landsteiner, patólogo y biólogo austríaco que descubrió y tipificó los grupos sanguíneos, motivo por el cual se le concedió el Premio Nobel de Medicina en 1930.
De acuerdo con la literatura médica, cada persona tiene aproximadamente cinco litros de sangre que el corazón impulsa a través de las arterias para llegar a todos los tejidos del organismo y recupera a través de las venas, tras oxigenarse en los pulmones.
El 55 por ciento de la sangre es plasma, un líquido que sirve de medio de suspensión a las plaquetas, los glóbulos rojos y los leucocitos o glóbulos blancos.
“Las plaquetas favorecen la coagulación y, por tanto, el taponamiento de las heridas cortando así las hemorragias, mientras que los glóbulos rojos llevan el oxígeno obtenido a su paso por los pulmones a todas las células del organismo”, puntualizan los expertos.
La sangre también contribuye a mantener el equilibrio de líquidos en el organismo y transportar las hormonas secretadas por las diferentes glándulas y que cumplen funciones reguladoras importantes en su funcionamiento.
En tanto, la presencia de leucocitos permite actuar contra las bacterias que atacan el organismo, cumpliendo así con una función moduladora del sistema inmunológico.
La sangre recoge los residuos del metabolismo celular para que sean eliminados a través de la orina, y además de oxígeno, también transporta el anhídrido carbónico que se obtiene del aire que se absorbe con la respiración.
Puede ser utilizada en el tratamiento de personas con enfermedades como la talasemia o la drepanocitosis y las anemias, como las que se producen, por ejemplo, en los pacientes oncológicos a consecuencia de la quimioterapia.
Asimismo, para afrontar las pérdidas de sangre que pudieran producirse en el transcurso de intervenciones quirúrgicas, y reaccionar convenientemente en complicaciones del parto que pueden ocasionar hemorragias antes, durante y después del mismo, entre otras aplicaciones.