El Ever Given, uno de los buques portacontenedores más grandes del mundo y propiedad de la naviera Evergreen, permanecía este miércoles encallado en el estratégico Canal de Suez, la vía navegable que conecta el Mar Rojo con el Mediterráneo, bloqueando la circulación en ambas direcciones y provocando un gran atasco en una de las principales arterias para el transporte marítimo mundial. El temor a problemas de abastecimiento debido al percance incluso impulsó el precio del barril de petróleo. El brent subió más de un 5% horas después de difundirse el suceso.
El incidente ocurrió el martes por la mañana y se conoció un día más tarde. Se produjo por la falta de visibilidad y las fuertes rachas de viento derivadas de las malas condiciones meteorológicas en Egipto, según informó la Autoridad del Canal de Suez. Una tormenta de polvo ha atravesado el país esta semana y el viento alcanzó 40 nudos (74 kilómetros por hora) en la concurrida vía marítima, lo que causó que el capitán del buque Ever Given, de bandera panameña y procedente de China, perdiera el control mientras cruzaba por el extremo sur rumbo a Róterdam (Holanda).
Numerosos buques de carga y petroleros permanecían detenidos en la parte sur del Canal a la espera de poder retomar la circulación, según mostraban los mapas en vivo de los rastreadores de tráfico marítimo. El Ever Given habría bloqueado el paso a “muchos petroleros”, aseguró en Twitter el rastreador de exportaciones de crudo Tanker Trackers. Fuentes del sector estimaban que, con una capacidad para unos 70 buques, la cola a media tarde del miércoles era ya de más de 150 embarcaciones.
Por el Canal de Suez, con unos 160 kilómetros de longitud e inaugurado en 1869, fluye poco más del 10% del comercio mundial, según estima la Autoridad. Es una de las vías más importantes del mundo en el transporte de gas, petróleo y mercancías. La infraestructura también representa una de las principales fuentes de ingreso de las codiciadas divisas extranjeras para Egipto. En 2015, el Estado egipcio completó una polémica ampliación del Canal, en uno los megaproyectos insignia del presidente Abdelfatá Al Sisi. Pero en este caso la ampliación no va a ayudar a resolver el atasco porque el Canal de Suez se dobló en el tramo que une los llamados Lagos Amargos con el Mar Mediterráneo, mientras que el buque quedó atrapado entre el Mar Rojo y los Lagos Amargos, un tramo de carril único.
El teniente general Osama Rabie, jefe de la Autoridad del Canal de Suez, explicó que la operación de rescate arrancó inmediatamente después de producirse el accidente. Detalló que la autoridad cuenta con ocho remolcadores, entre ellos uno con 160 toneladas de fuerza, empujando el buque atrapado desde ambos lados para tratar de hacerlo flotar y poder reanudar la navegación. No está claro cuánto puede durar la operación, aunque un trabajador del Canal indicó al medio local Cairo24, cercano a la Inteligencia egipcia, que podría prolongarse al menos dos días. Imágenes de la Autoridad han mostrado que al menos una excavadora estaba perforando la parte de la pared del canal contra la que se ha quedado encallado el barco, aunque este no se había movido de su posición. Además, dos dragas del Canal de Suez se han desplazado para sumarse a la operación por la noche, según ha informado Leth Agencies, un proveedor de servicios para la industria marítima mundial con sede en Noruega.
Por ahora, todavía se confía en que el incidente tenga un impacto moderado. “Los cargamentos podrían desembarcar con un ligero retraso, pero el impacto será insignificante en el contexto de los retrasos rutinarios relacionados con el clima en el tráfico de buques que se producen en todo el mundo”, anticipa François Conradie, analista de la consultora NKC African Economics. “El impacto en la economía egipcia también será insignificante: en el peor de los casos, los ingresos del canal disminuirán en proporción al tiempo de atasco del Ever Given, en relación con un año completo de ingresos. Ningún capitán dará la vuelta y navegará alrededor del Cabo de Buena Esperanza”, añade.
Lars Jensen, experto en el sector del transporte marítimo de contenedores, escribe, sin embargo, que el retraso que provoque el incidente podría provocar un pico de carga en los principales puertos de Europa, aumentando el riesgo de congestión portuaria dentro de una semana. Además, Jensen alerta que este escenario también retrasaría el movimiento de contenedores hacia Asia, así como la disponibilidad de contenedores vacíos allí.
Toda la tripulación del mega buque ha podido ser localizada y se encuentra a salvo, y no ha habido ni informes de heridos ni de contaminación o daños en la carga, según ha informado la compañía Bernhard Schulte Shipmanagement, encargada de la tripulación y de cuestiones técnicas, en un comunicado. La empresa ha añadido que las investigaciones iniciales descartan un fallo mecánico o del motor como causa del incidente. Por su parte, el teniente general Rabie ha detallado en una entrevista telefónica con la cadena egipcia Extra News que no se ha producido ninguna fuga y que el casco del barco se encuentra intacto.
Las imágenes difundidas del Ever Given muestran cómo la proa del gigantesco buque se encuentra atrapada en la pared oriental del Canal y la popa en la occidental, obstruyendo completamente el paso. Una de las primeras fotos que han aparecido en las redes sociales ha sido tomada desde el buque Maersk Denver, que se encuentra justo detrás del Ever Given. Su autora, Julianne Cona, ha notado en Instagram que el barco “parece súper atascado” y que “un montón de remolcadores [trataron] de tirar y empujar” sin éxito. Los buques suelen cruzar el Canal en grupo, pero en este caso el Ever Given ha sido el único afectado de su convoy.
El Ever Given, de 400 metros de eslora, 59 de manga y un tonelaje de 224.000 toneladas, según el comunicado de la Autoridad del Canal de Suez, se encuentra entre los buques portacontenedores más grandes del mundo. El barco forma parte de la flota de la empresa naviera Evergreen Marine Corp., con sede en Taiwán, y fue construido en 2018, según la descripción de la empresa, que tenía prevista su llegada a Róterdam el 1 de abril.