Este domingo se conmemoró el tercer Día Mundial de las Enfermedades Tropicales Desatendidas. La OMS lanzó el año pasado un nuevo plan para luchar contra estas veinte patologías tropicales vinculadas a la pobreza que aún afectan a mil millones de seres humanos, porque los objetivos de 2020 aún no se han alcanzado, aunque se hayan logrado avances sustanciales. En la RDC, país que alberga el 80% de los casos de tripanosomiasis o enfermedad del sueño, por ejemplo, en diez años hemos pasado de 7.000 casos a menos de 1.000 casos al año. Pero estos últimos casos son de más difícil acceso. Es por eso que las autoridades congoleñas están lanzando una campaña digital este lunes 31 de enero para recaudar fondos y alentar a las personas a hacerse la prueba.
Cabe recordar que la enfermedad del sueño es mortal si no se detecta y trata. Sin embargo, desde hace dos años existe un fármaco muy sencillo de administrar, lanzado precisamente gracias a la Iniciativa Medicamentos para Enfermedades Tropicales Desatendidas.
Erick Miaka, director del Programa Nacional de Control de la Tripanosomiasis del Ministerio de Salud de la RDC, junto con Claire Fages, del equipo editorial de África, recuerda los objetivos de esta campaña. «El objetivo es ante todo hacer incidencia con nuestros socios, nuestros donantes. Porque todos sabemos que vamos hacia (la erradicación) de la enfermedad para el 2030. Pero estos últimos casos nos van a costar un poco más, porque hay que ir a buscarlos».
Por lo tanto, es necesario llegar al mayor número de personas, especialmente en áreas endémicas y «A través de las redes sociales, ahora podemos llegar a mucha gente en poco tiempo».
La tripanosomiasis afecta más a las provincias que a las ciudades, recuerda Erick Miaka o «en las grandes ciudades la gente no le hace mucho caso a eso, aunque a veces vienen de esas provincias. Muy a menudo, cuando muestran síntomas, piensan más en la malaria que en la tripanosomiasis».
La Tripanosomiasis Humana Africana (HAT), más conocida como «enfermedad del sueño», solo existe en África. Es causada por un parásito y transmitida por la picadura de la famosa mosca tsetsé. A menudo fatal, provoca trastornos del sueño, trastornos del comportamiento, a veces ataques violentos.
«En la segunda etapa de la enfermedad a veces hay trastornos neurológicos, a veces incluso infertilidad. Así que cuanto antes te examinen mejor y sobre todo que el tratamiento sea gratuito», concluye Erick Miaka.