La junta militar maliense declaró ayer domingo, 5 de febrero «persona non grata» a Guillaume Andali, director de la División de Derechos Humanos en la misión de la ONU en Mali, MINUSMA, por ignorar la versión gubernamental sobre la situación de los derechos humanos en el país.
En un comunicado publicado hoy, el Ministerio maliense de Exteriores acusó a Andali de transmitir al Consejo de Seguridad de la ONU la versión ofrecida por personas «usurpadoras» que se hacen pasar por activistas de la sociedad civil, ignorando otras versiones.
La nota, que considera ese comportamiento una «acción desestabilizadora y subversiva», indica que el Gobierno de Mali ha dado un plazo de 48 horas al responsable de la MINUSMA para que abandone el territorio maliense.
La ONU, Francia y expertos en derechos humanos acusan al Ejército maliense y a mercenarios rusos del grupo Wagner ligado al Kremlin, que operan en el país africano, de perpetrar abusos contra los civiles a través de informes que el Gobierno de Mali rechaza.
Mali, gobernado por una junta militar después de dos golpes, ha limitado cada vez más la capacidad de operación de la MINUSMA, al tiempo que cuenta con el apoyo del grupo Wagner.