Autoridades de Chad están intentando recuperar la conectividad de Internet en el país tras un corte total de varias horas durante la jornada del domingo aparentemente conectado con la situación en Sudán, escenario desde el 15 de abril de combates entre el Ejército y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF).
La Autoridad de Regulación de las Tecnologías de la Información y la Comunicación de Chad (Arcep) ha confirmado que durante el domingo se registraron «disfuncionalidades» en el servicio de Internet, según ha recogido el portal de noticias Tchad Infos.
«Fue debido a problemas técnicos en dos líneas, principalmente la que conecta Adré y Yamena y la de Kousserie y Yamena», ha manifestado, antes de subrayar que «los técnicos están trabajando para remediar cuanto antes esta disfuncionalidad».
Asimismo, la organización NetBlocks, dedicada a hacer seguimiento de conectividad en la red, ha indicado que «la conectividad a Internet está siendo restaurada en Chad tras un apagón de varias horas a nivel nacional vinculado con el apagón (de Internet) en Sudán».
«El incidente ha sido atribuido al corte de infraestructura de fibra que suministra a Chad desde Sudán y Camerún. Ahora están activados los satélites», ha apuntado, según una serie de mensajes publicados en su cuenta en la red social Twitter.
NetBlocks ha recalcado además que «Sudán sigue en gran medida ‘offline'», con una conectividad «del dos por ciento sobre los niveles habituales». «El Ejército alega que las fuerzas paramilitares han saboteado el intercambiador de telecomunicaciones en Jartum», ha añadido.
Las hostilidades estallaron en el marco de un aumento de las tensiones en torno a la integración de las RSF –lideradas por Mohamed Hamdan Dagalo, alias ‘Hemedti’, quien es además vicepresidente del Consejo Soberano de Transición– en el seno de las Fuerzas Armadas, parte clave de un acuerdo firmado en diciembre para formar un nuevo gobierno civil y reactivar la transición.
El proceso de conversaciones arrancó con mediación internacional después de que el jefe del Ejército y presidente del Consejo Soberano de Transición, Abdelfatá al Burhan, encabezara en octubre de 2021 un golpe de Estado que derrocó al entonces primer ministro de unidad, Abdalá Hamdok, nombrado para el cargo a raíz de los contactos entre civiles y militares después de la asonada de abril de 2019, que puso fin a 30 años de régimen de Omar Hasán al Bashir.