Cuando asumimos esta responsabilidad el año pasado, el panorama global se enfrentó a desafíos multifacéticos: recuperación de la pandemia de Covid-19, amenazas climáticas, inestabilidad financiera y sobreendeudamiento en las naciones en desarrollo, todo en medio de un multilateralismo en declive. En medio de conflictos y competencia, la cooperación para el desarrollo sufrió, lo que impidió el progreso.
Al asumir la Presidencia del G20, India buscó ofrecer al mundo una alternativa al status quo, un cambio de un progreso centrado en el PIB a un progreso centrado en las personas. La India pretendía seguir siendo el mundo de lo que nos une, en lugar de lo que nos divide. Finalmente, la conversación global tuvo que evolucionar –el interés de unos pocos había dado paso a las aspiraciones de muchos. Esto requirió una reforma fundamental del multilateralismo tal como lo conocíamos.
Incluyente, ambicioso, orientado a la acción y decisivo– estas cuatro palabras definieron nuestro enfoque como presidente del G20, y la Declaración de Líderes de Nueva Delhi (DLND), adoptada unánimemente por todos los miembros del G20, es testimonio de nuestro compromiso de cumplir con estos principios.
La inclusión ha estado en el centro de nuestra presidencia. La inclusión de la Unión Africana (UA) como miembro permanente del G20 integró a 55 naciones africanas en el foro, ampliándolo hasta abarcar al 80% de la población mundial. Esta postura proactiva ha fomentado un diálogo más integral sobre los desafíos y oportunidades globales.
La primera de su tipo, la ‘Cumbre de la Voz del Sur’, celebrada por la India en dos ediciones, presagió un nuevo amanecer del multilateralismo. India incorporó las preocupaciones del Sur Global en el discurso internacional y ha marcado el comienzo de una era en la que los países en desarrollo ocupan el lugar que les corresponde en la configuración de la narrativa global.
La inclusión también influyó en el enfoque interno de la India hacia el G20, convirtiéndola en una presidencia popular digna de la democracia más grande del mundo. A través de los eventos «Jan Bhagidari» (participación popular), el G20 llegó a 1.400 millones de ciudadanos, involucrando a todos los estados y territorios de la unión (TU) como socios. Y en cuanto a los elementos sustantivos, India aseguró que la atención internacional se dirigiera a objetivos de desarrollo más amplios, en consonancia con el mandato del G20.
En el punto medio crítico de la Agenda 2030, India presentó el Plan de Acción del G20 2023 para acelerar el progreso hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), adoptando un enfoque transversal y orientado a la acción para abordar cuestiones interconectadas, incluidas la salud, la educación, la igualdad de género y la sostenibilidad ambiental.
Un área clave que impulsa este progreso es la sólida Infraestructura Pública Digital (IPD). Aquí, India fue decisiva en sus recomendaciones, habiendo sido testigo de primera mano del impacto revolucionario de innovaciones digitales como Aadhaar, UPI y Digilocker. A través del G20, completamos con éxito el Repositorio de Infraestructura Pública Digital, un paso significativo en la colaboración tecnológica global. Este repositorio, que incluye más de 50 IPD de 16 países, ayudará al Sur Global a construir, adoptar y escalar IPD para desbloquear el poder del crecimiento inclusivo.
Para nuestra única Tierra, introdujimos objetivos ambiciosos e inclusivos para crear un cambio urgente, duradero y equitativo. El ‘Pacto de Desarrollo Verde’ de la Declaración aborda los desafíos de elegir entre combatir el hambre y proteger el planeta, delineando una hoja de ruta integral donde el empleo y los ecosistemas sean complementarios, el consumo sea consciente del clima y la producción sea respetuosa con el planeta. Al mismo tiempo, la Declaración del G20 exige una ambiciosa triplicación de la capacidad mundial de energía renovable para 2030. Junto con el establecimiento de la Alianza Mundial de Biocombustibles y un impulso preocupado por el Hidrógeno Verde, las ambiciones del G20 de construir un mundo más limpio y verde son innegables. Éste siempre ha sido el espíritu de la India y, a través de Estilos de Vida para el Desarrollo Sostenible (LiFE), el mundo puede beneficiarse de nuestras antiguas tradiciones sostenibles.
Además, la declaración subraya nuestro compromiso con la justicia y la equidad climáticas, instando a un apoyo financiero y tecnológico sustancial del Norte Global. Por primera vez, se reconoció el salto cuántico necesario en la magnitud del financiamiento para el desarrollo, pasando de miles de millones a billones de dólares. El G20 reconoció que los países en desarrollo necesitan 5,9 billones de dólares para cumplir con sus Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (CDN) para 2030.
Dados los enormes recursos necesarios, el G20 enfatizó la importancia de contar con bancos multilaterales de desarrollo mejores, más grandes y más eficaces. Al mismo tiempo, India está asumiendo un papel de liderazgo en las reformas de la ONU, especialmente en la reestructuración de órganos principales como el Consejo de Seguridad de la ONU, que garantizarán un orden global más equitativo.
La igualdad de género ocupó un lugar central en la declaración, que culminó con la formación de un Grupo de Trabajo dedicado al Empoderamiento de las Mujeres el próximo año. El proyecto de ley de reserva de mujeres de la India de 2023, que reserva un tercio de los escaños del Parlamento y de la asamblea legislativa estatal de la India para las mujeres, personifica nuestro compromiso con el desarrollo liderado por las mujeres.
La declaración de Nueva Delhi encarna un espíritu renovador de colaboración en todas estas prioridades clave, centrándose en la coherencia de las políticas, el comercio confiable y una acción climática ambiciosa. Es un motivo de orgullo que durante nuestra presidencia, el G20 haya logrado 87 resultados y 118 documentos adoptados, un aumento del mercado con respecto al pasado.
Durante nuestra Presidencia del G20, la India dirigió las deliberaciones sobre cuestiones geopolíticas y su impacto en el crecimiento y el desarrollo económico. El terrorismo y la matanza sin sentido de civiles son inaceptables y debemos abordarlos con una política de tolerancia cero. Debemos encarnar el humanitarismo por encima de la hostilidad y reiterar que esta no es una era de guerra.
Estoy encantado de que durante nuestra Presidencia la India haya logrado algo extraordinario: revitalizó el multilateralismo, amplificó la voz del Sur Global, defendió el desarrollo y luchó por el empoderamiento de las mujeres en todas partes.
Al entregar la Presidencia del G20 a Brasil, lo hacemos con la convicción de que nuestras medidas colectivas en favor de las personas, el planeta, la paz y la prosperidad resonarán en los años venideros.