Las leyes surcoreanas impiden enjuiciar a un Presidente en ejercicio, pero la inmunidad no tiene efecto cuando los delitos investigados son rebelión o traición. El Ministerio de Justicia informó que el Presidente, Yoon Suk Yeol tiene prohibido salir del país, mientras se le investiga por su intento fallido de imponer la ley marcial, la semana pasada, en medio de crecientes peticiones para que renuncie.
Yoon está siendo investigado por los presuntos delitos de traición, amotinamiento y abuso de poder. Las imputaciones también recaen sobre varios altos funcionarios gubernamentales y militares involucrados en la polémica medida. De hecho, el hasta hace poco Ministro de Defensa y quien presentó su renuncia en los últimos días, Kim Yong-hyun, fue detenido el domingo 8 de diciembre.
Yoon emitió el pasado día 3 de diciembre un efímero Decreto de Ley marcial, que buscaba eliminar la acérrima oposición que ha encontrado en el Parlamento desde que asumió el Poder en 2022. Era la primera vez que se imponía una Ley Marcial en Corea del Sur desde que en 1980 una medida similar llevó a la recordada masacre de Gwangju, en la que centenares de personas fueron asesinadas por fuerzas militares del dictador Chung Doo-hwan.
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