Las medidas se mantendrán hasta finales de febrero de 2022 y afectan a 88 individuos de la cúpula de poder en Minsk y siete entidades. Las restricciones también tienen incluyen a actores económicos y empresarios que se benefician o apoyan el régimen de Lukashenko.
Precisamente en la reunión de este lunes del Consejo de Asuntos Exteriores de la UE, el Alto Representante del bloque para Política Exterior y Seguridad Común, Josep Borrell, abrió la puerta a considerar más medidas punitivas para responder a la represión continuada en el país, cuando se cumplen seis meses desde los comicios que dieron un sexto mandato al presidente bielorruso y cuya legitimidad no reconoce la UE.
Como en otros planes de sanciones europeos, las medidas consisten en la prohibición de entrada en la UE y la congelación de activos financieros en la Unión.