Para despejar las incógnitas sobre este tema, Nguema Obiang Mangue ha convocado urgentemente a la actual directiva y a todos los directores salientes de Ceiba Intercontinental, así como al ministro de Aviación Civil para informarse sobre este caso.
De acuerdo con los datos ofrecidos por los miembros del Consejo de Administración y algunos exdirectivos de la compañía nacional, los hechos se produjeron entre 2016 y 2017 cuando la aeronave de la compañía Ceiba Intercontinental se trasladó a Canarias, España, para una revisión y hasta la fecha no se sabe nada sobre el aparato.
Durante la cita desarrollada este martes, 6 de diciembre, en el palacio del pueblo en Malabo, se ha sabido que la empresa Bintter ubicada en Canarias exigió al Gobierno ecuatoguineano más de cuatro millones de euros para reparar la aeronave ATR 72. Unos pagos que supuestamente fueron autorizados por la Administración de Malabo. Sin embargo, el aparato todavía no se encuentra en tierras ecuatoguineanas.
Según los informes, la firma Bintter solicitó un monto adicional mientras exdirectores hablan de que un informe técnico determinó que el aparato ya era inservible. Por otra parte, Nguema Obiang Mangue se ha informado de que el ATR en cuestión ya ha sido desguazado.
Preocupado por esta situación, el vicepresidente quiere saber quién fue el director que autorizó el desmantelamiento del avión, el paradero de los fondos que el Ejecutivo desbloqueó para la reparación.
En este contexto, Nguema Obiang Mangue ha exigido a la directiva de Ceiba los comprobantes de ingresos, las facturas adicionales solicitados por la empresa, así como el contenido del contrato suscrito con Bintter a fin de esclarecer el asunto.
Porque según ha dicho, se trata de un activo de Guinea Ecuatorial, por lo tanto, los responsables deben rendir cuentas al pueblo; para ello ha programado otro encuentro con este colectivo en los próximos días.