El comité especial de la Carta de las Naciones Unidas y del Fortalecimiento de la Organización se ha reunido en la jornada de este martes 21 de febrero en sesión de trabajo. En este encuentro, la delegación de la República de Guinea Ecuatorial representada por Anatolio Ndong Mba, embajador representante permanente de Guinea Ecuatorial ante la organización de las Naciones Unidas en la ciudad de Nueva York, se ha alineado a la postura de oradores en nombre del Movimiento de Países No Alineados y el Grupo de Amigos en Defensa de la Carta de las Naciones Unidas, respectivamente.
«Pese a los grandes logros alcanzados», decía el representante de Guinea Ecuatorial, «gracias al admirable papel que viene ejerciendo el sistema de las Naciones Unidas para preservar la paz y construir un mundo mejor para todos, es urgente fortalecer el papel de la organización, con miras a ofrecer soluciones efectivas a los persistentes y variables desafíos contemporáneos. En este sentido, el trabajo del Comité Especial es transcendental para defender el propósito y los principios de la Carta de las Naciones Unidas, en lo que atañe al mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales, el desarrollo de la cooperación entre los Estados, la promoción del derecho internacional y la consolidación del multilateralismo frente al unilateralismo».
El embajador Ndong Mba, durante su intervención, manifestó que, «urge fortificar la organización mediante una reforma, de conformidad con los principios y procedimientos establecidos en la Carta de las Naciones Unidas, preservando el marco jurídico de dicha carta como instrumento constitutivo, procurando lograr un equilibrio adecuado entre los órganos principales de la organización y reforzando así mismo la cooperación y el diálogo entre estos; así como redoblar la cooperación con las organizaciones regionales lo que conllevaría a una dinámica de resolución de los conflictos más efectivas», exhortó.
«Sin embargo, sabemos que no será tarea fácil, porque en gran medida el cumplimiento exacto del mandato del Comité Especial depende de la voluntad de los Estados. Y, desafortunadamente, esta voluntad en los últimos años está siendo más orientada por el unilateralismo, con fines a preservar el interés propio en detrimento del multilateralismo, gracias al cual se constituyó esta organización, gracias al cual se ha conseguido grandes logros en la historia de la humanidad», señaló el diplomático ecuatoguineano.
Anatolio Ndong Mba resaltó por otro lado que, «seguimos observando con preocupación el régimen de aplicación de sanciones. Cabe subrayar que las sanciones deben aplicarse de plena conformidad con las disposiciones de la Carta de las Naciones Unidas y del derecho internacional, incluidos el derecho internacional humanitario, el derecho internacional de los derechos humanos y el derecho internacional de los refugiados, velando que estas no se adopten de forma unilateral, indiscriminada y desproporcionada a fin de evitar sufrimiento a grupos vulnerables en el país sancionado y/o la violación de los derechos de las personas sancionadas. Solo de esta manera, y haciendo una aplicación transparente y equitativa, las sanciones podrían constituir un instrumento importante para garantizar el mantenimiento y el logro de la paz y la seguridad internacionales”. Igualmente, insistió Ndong Mba en el contexto de que, «apoyamos la propuesta revisada de la República islámica de Irán, así como la de México, a fin de escuchar debates de fondo sobre estos temas, especialmente relevantes para el cumplimiento del mandato del Comité Especial».
«Acogemos con beneplácito el debate sobre la Solución Pacífica de Controversias, a fin de examinar los medios para su solución, de conformidad con el Capítulo VI de las Naciones Unidas, en particular las contenidas en el artículo 33, y de conformidad con la Declaración de Manila sobre el arreglo pacífico de controversias internacionales. Sobre este particular, seguimos invitando a los Estados continuar recurriendo a las herramientas que disponemos para resolver las controversias de forma pacífica, tales como la elección de la diplomacia preventiva como primera opción para evitar las escaladas en las disputas y/o recurrir a la Corte Internacional de Justicia. Este es el caso de la República de Guinea Ecuatorial y la República de Gabón que decidieron someter al arbitraje de la Corte Internacional de Justicia de la Haya su controversia fronteriza para una solución pacífica».
El embajador Anatolio Ndong Mba, en nombre y representación de la delegación ecuatoguineana, ha asegurado que «la Republica de Guinea Ecuatorial reafirma su compromiso con la Carta de las Naciones Unidas, los principios del derecho internacional y el multilateralismo, y por ende se compromete a seguir apoyando de manera constructiva al Comité Especial de la Carta de las Naciones Unidas y del Fortalecimiento del Rol de la Organización de las Naciones Unidas», concluyó.