El vicepresidente de la República, Nguema Obiang Mangue, inspeccionó el pasado viernes, los cuarteles militares destacados en la ciudad de Malabo. Realizó estas inspecciones periódicas para conocer el estado de los cuarteles e informarse de las carencias que hubieran en el lugar.
En su última visita en abril del año 2022, Nguema Obiang Mangue se informó de algunas dificultades que atravesaban los residentes: se trataba de la falta de agua potable, energía eléctrica, el asfaltado de algunos tramos de carretera, el pintado y la rehabilitación de estas instalaciones. A ese respecto, dio instrucciones a los altos mandos del Ejército y a Obras Públicas para encontrar una pronta solución.
Nguema Obiang se desplazó personalmente a los diferentes campamentos para comprobar el grado de cumplimiento de su mandato de hace alrededor de un año.
Durante el recorrido, que partió desde el campamento de la Marina en Sipopo hasta Acacio Mañe Ela, el vicepresidente ha podido apreciar una imagen diferente, lo que certifica que el cuerpo uniformado ya goza de estos servicios básicos de forma constante.
Pese a estos avances, ha ordenado el restablecimiento de agua potable y conexión de fluido eléctrico en algunas zonas que hasta ahora tienen estas carencias, y ha insistido una vez más en el buen uso de las infraestructuras del cuerpo castrense. Y para que se haga de forma constante, ha mandatado la contratación de empresas de mantenimiento de los grupos electrógenos, bombas de agua, alumbrado público y limpieza de exteriores.
En Mañe Elá, ordenó la destrucción de los viejos inmuebles y la urgente construcción de nuevos para evitar accidentes.
Estas visitas se enmarcan en el plan de acción diseñado por el vicepresidente de la República tendente a mejorar, por un lado, la calidad de vida de los uniformados y, por otro lado, el equipamiento y formación de recursos humanos de las carteras a su cargo.
Como líder carismático y popular que vela por el bienestar de sus conciudadanos, en cada cuartel visitado, Nguema Obiang Mangue ha sido aclamado por la población con cánticos y ovaciones por el afecto que sienten hacia su persona. Reacciones que ha correspondido con abrazos, sobre todo a los más pequeños.