Aunque hasta el momento ninguna autoridad diplomática se ha pronunciado para esclarecer cuál es la situación actual y las propuestas de mejora, todo apunta a que uno de los principales factores de la denegación de visados es la presentación de documentos falsos o de dudosa procedencia. Además, persiste el problema de los ‘tramitadores’, que inundan los sistemas de solicitud de visados. Se trata, en su mayoría, de los ‘gestores’ que cobran grandes cantidades de dinero para realizar estos procesos a nombre de los solicitantes sin ninguna garantía.
Guinea Ecuatorial mantiene relaciones diplomáticas con España desde su independencia en 1968. Ambos países cuentan con varios convenios en dirección a una excelente Amistad y Cooperación en cuyo marco se han celebrado varías comisiones mixtas que cubren todo el espectro de las relaciones bilaterales entre los dos países, prestando especial atención a la cooperación al desarrollo
Los vínculos históricos, culturales y humanos entre Guinea Ecuatorial y España marcan sus relaciones y, posiblemente sean más fuertes que las personas. En la actualidad muchos ciudadanos ecuatoguineanos siguen prefiriendo España como su destino de vacaciones, compras, salud o negocios, por la cercanía cultural, el idioma y porque gran parte tiene algún que otro familiar afincado en el país europeo.
Considerando que la población de Guinea Ecuatorial es en África “la única” que siempre ha entrado a España o a cualquier país occidental por la puerta grande, pasando por todos los protocolos y cumpliendo con todas las normas y prácticas exigidas. A diario se ve a nacionales de otros países africanos arriesgar sus vidas hasta cruzar el estrecho de Gibraltar e ingresar a Europa. Eso debería generar más fluidez en los desplazamientos de un lado para otro y viceversa.
En un momento en el que las relaciones consulares entre ambos países pueden verse dañadas, algunas personas consideran que en la actualidad el tema de la concesión de visados o la exención de los mismos debería estar sobre la mesa diplomática de diálogo entre Guinea Ecuatorial y España para encontrar los mecanismos para acercar más a ambos pueblos en beneficio de las personas. “España y Guinea Ecuatorial deberían seguir manteniendo este lazo fuerte e inquebrantable que siempre ha unido a nuestros pueblos. Yo considero España como mi segundo país. Siempre voy a menudo, por la facilidad que me resulta comunicarme, la cercanía de con personas, etc”, decía Antonina Ada a nuestra redacción.
“Considero que los gobiernos deberían en común poder diseñar si no existiera, algún mecanismo de control de expatriados y de repatriación a personas cuyo motivo de viaje no sea claro y no cumpla con las exigencias, pero las limitaciones no son una opción” resaltaba Ricardo Ela.