El sacerdote, Raimundo Ondó Oyono, Párroco de la iglesia San Antonio de Padua de Nkoantoma, y víctima de los robos del joven Pánfilo Tucha Nfono de 14 años, ha asegurado que este menor vive en Bumudi y llegó a su parroquia de Nkoantoma, donde engañó a los monaguillos de dicha parroquia diciéndoles que también es monaguillo en la iglesia de Bumudi, lo cual permitió a los demás jóvenes confiar en él y empezar de ponerle en los horarios de misa.
Según el reverendo Raimundo Ondó, una de las cosas que primero le llamó la atención fue cuando en una eucaristía que estaba ayudando Pánfilo Tucha, el menor se presentó con el alba de un sacerdote y no de un monaguillo normal y tras la celebración, al preguntarle sobre esta situación el muchacho dijo que su tío era un pastor y que se lo había dado, «una explicación que era falsa», afirma.
Pues, al seguir investigándole descubrieron que el menor de 14 años tenía en su poder la comunión, el vino, el cáliz, la patena, el incienso, el incensario, un misal y unos cupones entre otros objetos litúrgicos sagrados; cosas que había robado en varias parroquias como la de Bumudi, Etofili, Biyendem y la de San Antonio de Padua.
Por su parte, el autor confeso al ser preguntado sobre con qué fin robaba estos objetos sagrados, Pánfilo Tucha Nfono ha manifestado que está poseído por un «espíritu de sirena» que le atormenta y le empuja a hacer estas cosas, porque según el menor, «no suele ser consciente cuando comete estos robos», asevera.
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