El juzgado número 2 de Malabo ha procesado a una ciudadana de nacionalidad cubana, casada con un ciudadano ecuatoguineano y embarazada de 6 meses acusada de estafa. Supuestamente Claudia se dedicaba a extender falsos contratos a sus clientes a través de una agencia ficticia que se habría inventado para la compra de coches en el extranjero.
Se calcula que la cantidad total que habría estafado a los ciudadanos ecuatoguineanos supera los 100 millones de Francos Cefas. A parte de los entrevistados en el juzgado, las investigaciones señalan que podría haber 12 víctimas más de esta operación tramada por la ciudadana cubana.
Hacía tiempo que los investigadores le seguían la pista, desde cuando se tuvo conocimiento de la primera denuncia. La acusada al principio, contactó con sus primeras víctimas para evitar alarmar el caso y llegar en las instancias superiores mostrándoles su interés de devolverles los fondos en un periodo de tiempo indefinido.
Tras la primera denuncia, llegó la segunda y así sucesivamente, lo cual, alarmó a la policía para iniciar las investigaciones y descubrir luego que, con su falsa agencia había conseguido timar, con el mismo procedimiento a otras varias víctimas.
Una vez detenida, ha sido puesta a disposición de la autoridad judicial, donde ha respondido por un presunto delito de estafa: «Les he estado mintiendo dandoles plazos, desgraciadamente las primeras transferencias de la mayoría de los clientes no existen», ha reconocido la acusada ante las autoridades.
El juez encargado del caso Oscar Eñeso , tras escuchar sus declaraciones, así como las de una decena de sus víctimas, ha mandatado su entrada en prisión a la espera de la celebración de un juicio.