Atracos y más atracos por doquier. La población residente en la ciudad de Malabo vive atemorizada desde hace varios meses por las pandillas de delincuentes que campan a sus anchas sembrando el terror en las calles y que poco les importa sobre las consecuencias de sus actos.
Lo que al parecer empezó como una estrategia de sensibilización de «No a la Delincuencia», ideada por la televisión nacional en mostrar cada jueves a los delincuentes capturados por la brigada judicial, hoy se ha convertido en una especie de propaganda para éstos en donde exhibir su poderío y marcar territorio ante sus adversarios. A día de hoy los atracos, asesinatos, robos, violaciones y demás atrocidades, no hacen más que aumentar y esta situación parece normalizarse, a pesar de su gravedad y consecuencias.
Hace unas semanas el presidente de la comunidad de vecinos del barrio El Porvenir apareció en televisión pidiendo al gobierno que tome ya cartas en el asunto, porque en esa localidad ya ni se puede transitar pasadas ya las seis de la tarde, incluso ya no se está seguro ni en las propias viviendas porque las violan a diario. Una banda conocida como “Los Machetes” reivindica los hechos presumiendo de poderío y de tener el control del barrio. La misma situación se registra en barrios como Santa María III, Ela Nguema, Sumco, Mbañé, Basupú-Fistown, Sampaka, Alcaide, Fistown etc.
Dar con los motivos que han originado este caos merece un análisis profundo, pero en la opinión de la mayoría de la población residente en Malabo, el principal es la impunidad, es decir, que se pasa por alto esta situación. “Estos delincuentes no están siendo castigados ni nada. Se les lleva a la policía o a la cárcel, pero a las dos semanas salen y por eso casi todos son reincidentes. Aquí parece que alguna gente está haciendo dinero sucio con una desgracia comunitaria”, así de tajante ha dicho a este medio un vecino del barrio Sumco, quien hace una semana fue macheteado sobre las ocho de la noche por una banda de delincuentes y haber sufrido tres robos en tan solo cinco meses. “Ya es hora de que el gobierno haga algo”, sentencia.
“No sé porqué el gobierno está pasando por alto una situación que ya es insostenible. Estos chicos están atemorizando a toda una ciudad y nadie hace nada al respecto. No podemos vivir así. Ustedes como medios de comunicación y puente entre el gobierno y la población, tenéis que denunciar esto”, dice un vecino del barrio Santa María III, quien avisa de tomar la justicia de su propia mano ante la pasividad o impunidad de la que gozan estos delincuentes.