85 días después de que ocurriera el incidente del colegio Manuel Javier, este centro vuelve a ser noticia. Se ha informado a esta redacción que un grupo de estudiantes de este colegio ubicado en Buena esperanza I vuelve a ser evacuado a los diferentes hospitales de la ciudad de Malabo.
Una de las primeras informaciones que se tienen es que muchos estudiantes estaban esperando a sus padres, de repente empezaron a tener dolor de pecho, cabeza y mareos y empezaron a desmayarse. Como en el incidente anterior, sólo se han reportado el desmayado de las niñas. De momento hay diez alumnas que siguen bajo observación; las mismas que se desmayaron la vez anterior.
En el hospital regional de Malabo, algunas madres, padres y tutores de los estudiantes están alterados y nerviosos e indignados a la espera del parte médico mientras exigen a la directiva que les explique qué está sucediendo realmente con el colegio.
Un tutor ha declarado a esta redacción que, según le ha informado su sobrina, todo comenzó a las nueve de la mañana. También aseguró que estuvo en el colegio a las 11h porque quería hablar con el tutor y no le dejaron entrar, tampoco le permitieron acercarse al colegio ni asomarse. Le dijeron que volviera mas tarde.
“Dicen que yo hable con el dueño que va a estar a las cinco. Después de salir del centro he ido a por mis gafas, pero más tarde mi hermana me llama que desde las nueve de la mañana les tenían ahí y no dicen a nadie nada” ha afirmado. «La directiva ha convocado a los tutores y ha explicado a los padres que se ha llevado a los jóvenes a diferentes hospitales y se ha ido recopilando los informes médicos. La Policía también ha hecho su trabajo», ha añadido.
“No hay ninguna explicación que te digan, sólo que tu hija va a la brujería, algo que tu no reconoces que hace tu hija. Esa niña desde que la tengo no se ha desmayado en casa ¿por qué precisamente en clase es donde debe ir desmayándose?. No explican a la gente nada”. Relata muy molesta una madre.
“La vez pasada yo misma pagaba las facturas de mi hija. Nadie me devolvió el dinero ni me dijeron nada, salvo que mi niña hacía brujería en la reunión porque es lo que determinaron ahí” dijo bastante alterada otra madre.
“Ha empezado en primero de Bachillerato. Las niñas de ahí han empezado a desmayarse ¿Y no dicen nada hasta la una? Si alguien muere ahí ¿Qué van a decir?» Dice otra madre.
Recordemos que en el anterior suceso, las niñas habían declarado que el jefe de estudios les había castigado en el patio bajo el sol durante al menos una hora después de la formación de la mañana por cantar mal el himno nacional, aunque el director del centro alegó después que se debía a un fenómeno especial por las manifestaciones de las jóvenes durante el momento de inconsciencia.