Los fieles católicos y sacerdotes de la Diócesis de Bata se han reunido este martes en la Catedral de Bata con un propósito común: asistir al acto de traspaso del episcopado del Monseñor Juan Matogo Oyana, quien se retira como Obispo, tras más de tres décadas de servicio dedicado a la Iglesia Católica.
Esta ceremonia que ha coincidido con la festividad de la Inmaculada Concepción, Patrona de Guinea Ecuatorial, ha sido presidida por el Nuncio Apostólico Monseñor José Avelino Bettencour, acompañado por los Obispos de la Conferencia Episcopal de Guinea Ecuatorial, y personalidades políticas destacadas, como el Gobernador de Litoral, Bartolomé Owono Nze; el Alcalde de Bata, Francisco García Gatsen, así como los representantes del ministerio de Justicia, Culto e Instituciones Penitenciarias entre otros. 
Durante la celebración, Monseñor Juan Matogo Oyana, quien fue ordenado Obispo por el Papa Juan Pablo II en Roma el 6 de enero de 1992, ha cedido su cargo tras cumplir 75 años, en conformidad con el Canon 401 del Código de Derecho Canónico que establece la renuncia obligatoria a esta edad. Desde el 10 de noviembre de 2024, Monseñor Miguel Ángel Nguema Bee, de la Diócesis de Ebibeyin, ha asumido como Administrador Apostólico de la Diócesis de Bata, en espera de que el Papa Francisco designe a un nuevo Obispo para la jurisdicción.
Matogo Oyana, ahora Obispo emérito, culmina una destacada trayectoria eclesiástica que lo llevó desde su diócesis natal de Ebibeyin hasta Bata, donde se consolidó como un líder por su comunidad.
Nacido en 1949 en la localidad de Nkue-Esandon, Matogo Oyana inició su ministerio en la diócesis de Ebibeyin, donde sirvió durante once años antes de ser transferido a Bata en 2002, sucediendo en ese momento a Monseñor Anacleto Sima Ngua. Su jubilación marca el final de un capítulo sobresaliente en la historia de la Iglesia Católica en Guinea Ecuatorial.
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