La mujer identificada como Esther Ada ha negado rotundamente las acusaciones en su contra, a pesar de las evidencias encontradas. En su declaración, afirmó que el objeto hallado en su puesto fue preparado por su hermana con el propósito de disuadir a quienes intentaban robarle mercancías y no para perjudicar las ventas de otros comerciantes, como alegan sus colegas.

Ante este insólito caso, la alcaldesa del ayuntamiento número 2 de Bata, Sonia Oyana Edu, declaró que la supuesta implicada había estado resistiéndose y obstaculizando los servicios de limpieza de la municipalidad en días anteriores.
Gracias a la intervención de los agentes del orden público y municipales, se descubrió lo que se ocultaba detrás de las mesas del puesto de Esther Ada: un presunto amuleto utilizado para atraer más clientes que el resto de los comerciantes.
Este hecho, tanto inquietante como lamentable, ha conmocionado a los vendedores del mercado de Bikuy y a los clientes habituales del puesto, quienes constataron que este lugar atraía una cantidad desproporcionada de compradores en comparación con otros.