La Comisión Europea ha multado a Google con 1.490 millones de euros por prácticas contrarias a la libre competencia en el mercado de la publicidad en buscadores en webs de terceros. Es la tercera sanción que impone Bruselas al buscador en dos años por abusar de su posición de dominio en el mercado.
La Comisión anunció en julio de 2018 una multa a Google de 4.343 millones de euros, la mayor de la historia del organismo, por sus prácticas anticompetitivas con el sistema operativo para móviles Android. En 2017 había sancionado a la compañía con 2.424 millones de euros por favorecer su comparador de productos Google Shopping. La multinacional estadounidense ha recurrido ambas decisiones ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea.
Ahora, la UE encuentra probado que Google ha impuesto condiciones contractuales contrarias a la libre competencia a las webs que utilizan su motor de búsqueda. La multa de 1.490 millones de euros supone un 1,29% de la facturación de Google en 2018. La sanción se ha calculado sobre la base del valor de los ingresos de Google procedentes de la intermediación publicitaria en buscadores en el Espacio Económico Europeo.
«Google ha consolidado su dominio en los anuncios ligados a las búsquedas y se ha protegido de la presión de la competencia mediante la imposición de restricciones contractuales anticompetitivas en sitios web de terceros«, ha dicho Margrethe Vestager, comisaria europea de Competencia de la Comisión Europea. «La mala conducta duró más de 10 años y negó a otras empresas la posibilidad de competir por los méritos e innovar, y a los consumidores los beneficios de la competencia».
Cruzada
Europa inició su cruzada contra Google en 2015, cuando acusó a la compañía estadounidense de abusar de su posición de dominio para favorecer su comparador de productos. En julio de 2016, Vestager anunció el envío de un pliego de cargos contra la empresa estadounidense por competencia desleal en la publicidad online de webs de terceros. En él, se explicaba que Google imponía restricciones a la muestra de publicidad de competidores en los resultados de las búsquedas que aparecen en otras páginas webs.
A partir de 2006, la compañía obligó a estas webs a no mostrar anuncios de motores de búsqueda de competidores, práctica que fue sustituyendo gradualmente desde 2009 por la exigencia de visualización preferente de un número mínimo de anuncios de búsqueda de Google. Además, se reservaba el derecho a autorizar los anuncios de la competencia. Posteriormente, la multinacional empezó a modificar estos contratos para otorgar más libertad a los socios de Adsense. Finalmente, Google canceló estas prácticas unos meses antes de que la CE presentara el pliego de cargos.
Cambios en Android
El anuncio de la multa a Google se ha producido horas después de que la multinacional estadounidense anunciara su intención de abordar nuevos cambios en Android y Google Shopping para plegarse a las exigencias de la Unión Europea en estos dos productos, objetos de sendas multas en los últimos años. Así, la compañía aseguró ayer que preguntará a los usuarios de los móviles Android en Europa si desean cambiar a un motor de búsqueda o navegador web de un competidor. Asimismo, anunció un nuevo formato en Google Shopping que enlaza directamente con otros comparadores de compra, así como con productos concretos ofrecidos por los vendedores.
«Siempre hemos estado de acuerdo en que los mercados sanos y competitivos son algo que nos interesa a todos. Hemos hecho gran cantidad de cambios en nuestros productos para cumplir con las preocupaciones de la Comisión Europea. En los próximos meses, llevaremos a cabo nuevas actualizaciones para dar mayor visibilidad a nuestros competidores en Europa», ha incidido Kent Walker, SVP, Global Affairs & Chief Legal Officer, tras conocer la decisión de Bruselas.