Tras 15 años de control de la malaria en la isla de Bioko se ha conseguido reducir de forma drástica la morbilidad y mortalidad asociadas a la malaria. Pero los datos se han estancado y para lograr la eliminación de la enfermedad el Gobierno de Guinea Ecuatorial apostó por el desarrollo de una vacuna. Se han invertido, desde 2012, más de 55 millones de dólares en la Iniciativa de Vacuna Ecuatoguineana contra la Malaria (EGMVI), la Vacuna Sanaria PfSPZ, y en la construcción de una estructura física y de capital humano para su implementación. La EGMVI tiene como objetivo conseguir una vacuna de esporozoito Plasmodium falciparum, junto con intervenciones estándar de control de la malaria, que logre eliminar la malaria de la isla de Bioko, convirtiéndose en un modelo potencial para futuras campañas de eliminación en otros lugares.
Con el Laboratorio de Investigaciones de Baney -dentro de un proyecto más ambicioso de Instituto Nacional de Investigación- los avances en la EGMVI están progresando a pasos agigantados. La asociación público-privada del programa está dando grandes resultados en el desarrollo e investigación biomédica en Guinea Ecuatorial y está siendo clave en la lucha contra la COVID-19. En la actualidad, la EGMVI ha completado tres ensayos de la vacuna en Guinea Ecuatorial, dos ensayos de la vacuna y un estudio de incidencia de la malaria en Tanzania y se han iniciado los preparativos para un ensayo clínico con más de 2.100 voluntarios. En estos momentos, el personal técnico se está formando para obtener distintos títulos avanzados en el extranjero y capacitándose en buenas prácticas clínicas y métodos específicos del protocolo.