“Muy solidaria, muy sociable, siempre estaba con su negocio, no buscaba problemas con nadie”, así declaró uno de los vecinos de Patricia que pese a la amabilidad con la que la definen, no notaron su ausencia.
Según familiares cercanos, la finada rondaba entre los 50 años vivía sola y llevaba varios días desaparecida, ni los vecinos ni la familia denunció su ausencia.
Después de varios días, la vecindad del barrio Santa María III comenzó a percibir malos olores provenientes de la vivienda de Patricia Ngui Dang, funcionaria del ayuntamiento de Malabo y comerciante, dieron la voz de alarma y, en el interior del hogar se halló el cadáver de la finada en estado avanzado de descomposición.
De momento los investigadores descartan que la causa de la muerte de Patricia haya sido provocada, por el avanzado estado de putrefacción en el que se encontró el cuerpo, el Gobierno Municipal procedió de inmediato al levantamiento de cadáver y posterior sepultura.