«Para Nokia estaba claro desde los primeros días de la invasión en Ucrania que sería imposible mantener nuestra presencia en Rusia», reza el comunicado de la compañía.
No obstante, la firma finlandesa señaló que, «por razones humanitarias, Gobiernos occidentales expresaron sus preocupaciones de que la infraestructura crítica de la red de telecomunicaciones falle en Rusia» y destacaron la «importancia de garantizar el flujo continuo de la información y el acceso a Internet». «De este modo, mientras salimos, intentaremos brindar el apoyo necesario para mantener las redes y estamos aplicando las licencias correspondientes para brindar este apoyo en cumplimiento con las sanciones actuales», agregaron.