Togo acaba de pasar a la quinta república y con un sistema de gobierno parlamentario. Ayer lunes, 25 de marzo la Asamblea Nacional adoptó una nueva Constitución, la cual introduce un importante cambio que hace pasar al país de un sistema semi-presidencialista a un sistema parlamentario. Este cambio aprobado por 89 votos a favor, 1 en contra y 1 abstención redefine los mecanismos de designación del Jefe del Estado y redistribuye los poderes entre las instituciones.
Según la nueva Constitución, a partir de ahora el Presidente será elegido por la Asamblea Nacional y el Senado, reunidos en congreso, «sin debate», para un único mandato de seis años. Según los informes, el Presidente sólo tendrá un papel honorífico, y a partir de ahora inaugurará los crisantemos. Se trata de un cambio radical con respecto al sistema anterior, en el que el Presidente era elegido por sufragio directo, para un mandato de cinco años renovables por una vez, y en el que el Ejecutivo era bicéfalo, con un Presidente elegido por sufragio universal directo que nombraba a un Primer Ministro y a los ministros.
El texto constitucional aprobado por abrumadora mayoría en una Asamblea Nacional togolesa, ampliamente dominada por el partido gobernante, Unión por la República (UNIR), crea también nuevas funciones en el aparato del Estado. Entre ellas figura el cargo de «Presidente del Consejo de Ministros», elegido por un mandato de seis años, que tendrá una autoridad considerable en la gestión de los asuntos del gobierno y será responsable ante el Parlamento. El cargo lo ocupará el líder del partido o coalición que haya obtenido la mayoría en las elecciones generales.
Para el país, esto representa un cambio importante y una transición hacia la Quinta República de Togo, a pocas semanas de las elecciones legislativas previstas para el 20 de abril.