La fiscalía ha confirmado sus sospechas durante el interrogatorio llevado a cabo este lunes a la otra implicada, Emilly, novia del presunto asesino del empresario. Quien, según su versión fue la que llamó a la puerta de la víctima y éste al conocerla la dejó entrar; ha dicho también que dejó la puerta entre abierta para que su novio, Tomás Esono, asesino confeso de «abuelo Lima» cumpliera con su objetivo.
«Cuando entramos, Tomás me dijo que yo buscase una cuerda para atarle. Lima me preguntó qué pasa aquí e intentó gritar. Tomás cogió el bastón y se lo golpeó en la mano y se cayó al suelo», ha declarado Emily.
La implicada ha declarado también que fue ella la que cerró la puerta con llave, subió el volumen de la tele para ocultar los gritos de la víctima y movió la mesa para que su novio acabara con la vida de Lima.
El juez encargado del caso ha querido saber dónde guardaron las ropas manchadas con la sangre de su víctima. Según la novia del asesino confeso, su pareja se cambió en la escena del crimen y la puso dentro de una mochila. El encargado del caso ha querido saber también a quién le mandaron el mensaje utilizando el teléfono de la víctima.
La fiscalía por su parte cree que ambos llegaron al lugar con la idea de acabar con la vida del empresario.
Con las declaraciones de Emily, se produce un giro en este caso, ya que cuando se detuvo a Tomás Esono, en sus primeras declaraciones, aseguró que actuó solo en todo momento y que la víctima no puso resistencia y éste al contrario le dijo «haz lo que has venido a hacer».