Emmerson Mnangagwa asumió la presidencia después de un golpe militar en 2027 contra Robert Mugabe. Obtuvo el 52,6% de los votos en las elecciones que tuvieron lugar a mitad de esta semana, mientras que su rival Nelson Chamisa tuvo 44%. Esta victoria asegura que el partido ZANU-PF retenga el liderazgo gubernamental que ha ostentado durante los 43 años de historia de Zimbabue desde su independencia en 1980.
La elección estuvo programada para realizarse en un solo día, pero se extendió debido a retrasos en la impresión de papeletas. La rapidez en anunciar los resultados también llamo la atención, ya que se esperaba varios días después del cierre de la votación.
En esta espera el partido de la oposición ha rechazado los resultados y la incertidumbre presidente en medio de señalamientos de manipulación de los resultados y presión hacia observadores de las elecciones por parte del partido gobernante.
Nelson Chamisa, líder de Coalición Ciudadana por el Cambio(CCC), el principal partido opositor, no tardó en expresar su descontento. Chamisa calificó la elección como un fraude flagrante y gigantesco y afirmó que impugnaran los resultados debido a la falta de una adecuada recopilación de los mismos.
Por su parte, Emmerson de 80 años se mostró confiado en una conferencia de prensa este domingo 27 de agosto, rechazando las acusaciones de fraude y declarando que las elecciones se llevaron a cabo de manera transparente y justa.